Olimpo de Bahía Blanca (2011)Desde que el mundo es mundo o quizás desde antes (?),
Olimpo se dedicó a explotar comercialmente hasta el último centímetro de su indumentaria. En el 2011 llegó a tener 10 empresas a la vista e incluso algunas aparecían por duplicado. El diseño en la ropa de los bahienses
ha variado en los últimos tiempos pero ya casi nadie lo percibe. Detrás del bingo y todo lo demás, dicen que hay una camiseta.
Talleres de Córdoba (2004)La T hizo una gran campaña en el Apertura 2004, pero el pésimo sistema de los promedios no le permitió mantener su lugar en Primera División. Al margen de las estadísticas, los cordobeses llamaron la atención por su excesiva cantidad de auspiciantes: 9. Y no sólo eso, sino que estaban muy mal ubicados.
Para pintar un poco la situación, uno de los chivos de la casaca de
Talleres era del restaurante que le daba de comer al plantel cada vez que viajaba a Buenos Aires. Canje, sí, canje.
Banfield (2010)Esa extraña experiencia de ser campeón le deparó a
Banfield una participación en la Copa Libertadores de 2010 para la cual no estaba preparado, al menos desde el aspecto de la indumentaria.
En el segundo partido de la fase de grupos, en Ecuador, el
Taladro utilizó ante el Deportivo Cuenca la misma camiseta
Mitre que veía usando en el torneo local pero con algunas modificaciones nada delicadas.
Para empezar, parchó ¡con cinta! el auspicio de una empresa de créditos, le agregó el chivo de una fábrica de cerámicas a la altura de la panza, completó con más publicidades en las mangas, otras en la espalda, y coronó con el clásico logo de la Copa, pero ¡en el único hueco que le quedaba en el pecho! Y el bingo, claro, siempre presente. Todo muy feo.
Abajo tambiénEl mundo del ascenso es un sitio ideal para las casacas híper sponsoreadas, casi tanto como algunas ligas menores de europa, donde los clubes
no tienen inconveniente en minar de patrocinios a sus jugadores.
En el
bajo fondo de nuestro fútbol son muchos los equipos que salen a la cancha dando la apariencia de una auto de fórmula uno. Según nos consigna el sitio especializado
Piel de ascenso,
Sarmiento de Junín ha sido uno de los grandes ejemplos de los últimos tiempos, llegando a juntar cerca de una decena de anuncios en su ropa.
Otro que también da la nota es
Instituto de Córdoba, conjunto del Nacional B que en el 2012 lució 10 publicidades...¡sólo en el pantalón!