Si bien ayer el uruguayo no trabajó a la par de sus compañeros, en el Sur confían en recuperarlo para el choque del sábado ante Racing. A su vez, de cara a estas cuatro finales, el plantel tuvo una intensa charla con Caruso.
Sin Joaquín Boghossian, quien continuó con una rutina física diferenciada en el campo principal del Estadio Centenario, el plantel de Quilmes trabajó ayer en el anexo, donde se realizaron trabajos técnicos. Además, al término de la práctica, Ricardo Caruso Lombardi reunió al plantel en el centro de la cancha y mantuvo una charla por espacio de 20 minutos.

El contenido de la conversación no trascendió, aunque tendría que ver con mantener alerta a la tropa para lograr la difícil empresa de mantener al Cervecero en Primera División, algo que se dificultó aún más luego de la victoria de Godoy Cruz, uno de los rivales directos, sobre Atlético de Rafaela.

En tanto, en el campo auxiliar, los jugadores se dividieron en cuatro grupos de siete y llevaron a cabo dos tareas diferentes. Por un lado, 14 futbolistas realizaron trabajos de definición con velocidad y slalom, mientras que el resto del plantel se enfrentó en un fútbol reducido sin arcos, que apuntaba a mantener la posesión de la pelota.

Hoy lo prueban

A su vez, Joaquín Boghossian trotó en soledad en el Estadio Centenario, ya que la intención del cuerpo técnico es que el delantero pueda hacer fútbol esta tarde y llegar sin problemas al duelo del sábado a las 20.30 ante Racing.

Por su parte, debido a sus respectivas lesiones, Pablo Garnier trabajó en el gimnasio, mientras que Sebastián Martínez pasó por kinesiología. Ambos futbolistas están descartados para el choque frente a la Academia.