El 90% de la población argentina es lectora, 4% más que en 2001. Este aumento se dio en casi todos los formatos y soportes, dado que los lectores de diarios crecieron de 78% a 80%; los de libros pasaron de 55 a 59%; y los digitales -población que lee de la pantalla de la PC- se duplicó en el mismo período, trepando del 21 al 48%, y entre los menores de 25 años llega al 75%.
En cambio, en la última década, sólo los lectores de revistas son menos: disminuyeron de 65 a 60%.
Así lo indican los resultados de la segunda Encuesta Nacional de Hábitos de Lectura, realizada durante octubre y noviembre de 2011, a personas de más de 12 años, en todas las regiones del país. Fue impulsada por el Ministerio de Educación, la Secretaría de Cultura de la Nación y otros organismos públicos, que permite observar los cambios en las prácticas, preferencias, motivaciones y tiempo dedicado a la lectura, entre otros datos.
En 2001, los lectores -definidos como quienes leen durante 15 minutos o más algún tipo de material- llegaban al 86% y hacia 2011 ascendían al 90%.
También se lee con más frecuencia: hay un 6% más que leen todos o casi todos los días respecto de 2001 (de 47% se pasó a 53%). Asimismo, quienes leen algunos días por semana crecieron un 12% en una década (de 20 a 32%).
Lectura digital
En el informe "Lectores, libros, lecturas. Cambios en las prácticas y hábitos de lectura" se analizó cómo en estos 10 años comenzó a incidir la lectura digital. En 2001 sólo un 21% leía de la pantalla de la computadora, en 2011 el 48%.
Además la encuesta revela que más que desplazar los formatos de lectura tradicionales -diarios, libros, revistas-, la lectura digital tiende a combinarse, reforzándose así el hábito: los lectores digitales tienden a leer sustantivamente más libros, diarios y revistas que los no digitales.
Género
Respecto al género, las tasas de lectura no varían entre hombres y mujeres, pero hay diferencias en cuanto a lo que se lee: los hombres leen un poco más el diario (80% contra 76%); las mujeres leen más libros (66% versus 58%), revistas (69% a 54%) y publicaciones no masivas, como periódicos barriales, religiosos, políticos.
En tanto, difieren los motivos de esta práctica: los hombres vinculan la lectura más con la necesidad de estar informados (7% más que las mujeres) y con la lectura por trabajo (6% más); las mujeres vinculan más la lectura por placer (6% más) y para aprender cosas nuevas (8% más).
Grupos de edad
Al observar la lectura en los distintos grupos etarios, en el informe se destacan "fuertemente los dos grupos de los extremos: las personas de entre 12 y 17 años y los mayores de 60 años".
Se indica que estos grupos concentran a las personas que "tienden a leer menos que el resto" y entre las razones de la no lectura se destacan: "las cuestiones económicas y, especialmente, los problemas de vista. Estas dificultades de los mayores tienden a repetirse en las distintas formas de lectura".
En cuanto al grupo de los más jóvenes, se detalla que "hay menos lectores de diarios, leen con menos frecuencia y no manifiestan el hábito de leer el diario todos los días". Al respecto se destaca que "quizá sea porque estos nativos digitales se informan más por otros medios o porque a esa edad aún son pocos quienes tienen el hábito de leer el diario". Sin embargo se destaca que este grupo tiene muchos lectores de libros (80%), revistas (73%) y pantalla de PC (76%).
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