La mirada certera para detectar los indeseados “saleros”, según se califica vulgarmente a los remanidos problemas en la piel, puede ser historia vieja si se consideran algunas formas para combatirlos. Quirúrgicas o alternativas, son una nueva propuesta médica que deja de lado prejuicios, sin que encarar esta mejoría represente dolor ni sufrimiento.

Conseguir firmeza y tonificación en los brazos, para que el indeseado "salero" desaparezca, es algo que hombre y mujeres por igual intentan lograr, a veces sin el éxito esperado.

Existen distintos tratamientos, algunos de ellos quirúrgicos y otros no, que se pueden realizar, que el paciente podrá evaluar antes de tomar una decisión.

El doctor Martín Moyano Bradley, de Estética Buenos Aires explicó de qué se tratan estos tratamientos para lograr firmeza y tonificación en los brazos, destacando que entre los no quirúrgicos se encuentran:

La Radiofrecuencia corporal: es un tratamiento no invasivo, no quirúrgico y sin inyecciones, clínicamente probado para reafirmar y modelar la piel a través de la estimulación del propio colágeno. Es una radiofrecuencia profunda y controlada. Actúa profundamente sobre la piel sin dañarla mediante la aplicación de calor.

Durante el tratamiento se siente una breve sensación de calor que llega a las capas internas de la piel. Esto significa que el colágeno está siendo estimulado y reafirmado. La duración este procedimiento depende de la zona a tratar, es totalmente indoloro y funciona en todo tipo de pieles. Inmediatamente después del tratamiento se sentirá y se notará la piel más suave, firme y elástica.

Plasma Rico en Plaquetas: se obtiene por centrifugación diferencial de sangre autóloga, es decir, extraída del mismo paciente, al ser utilizado mediante mesoterapia (microinyecciones), en las zonas más flácidas. Estimula la producción de colágeno, elastina y tejido epidérmico, lo que se traduce en una piel joven, tersa y de mejor calidad.

Las plaquetas que fluyen en la sangre están repletas de unas citoquinas llamadas Factores de Crecimiento. Esos factores tienen la capacidad de acelerar la reparación de tejidos colágenos como el cartílago articular, tendones y músculos. Los factores de crecimiento intervienen en los procesos de reparación, restauración y regeneración celular. Son generados por el propio organismo con las características inmunes de cada individuo.

Se trata de un procedimiento completamente natural, no tóxico ni alergénico dado que se utiliza la propia sangre del paciente, resultando en un tratamiento sin efectos secundarios. Primer aspecto para considerar evitando cualquier temor, lo que no significa, claro está no informarse bien antes de elegirlo.

Al respecto, el doctor Moyano Bradley, explica: "Es un procedimiento totalmente aséptico: la extracción de sangre, que se realiza con material descartable y de uso único, se hace utilizando tubos estériles de vacío asegurando que la sangre nunca tome contacto con el aire ni con ningún contaminante. Luego, eso tubos se someten al proceso de centrifugado donde se separa el plasma rico en plaquetas del resto de los componentes de la sangre. "Ese plasma se recolecta en una jeringa estéril, quedando listo para su aplicación", informa el experto en relación a este tratamiento.

Como vemos hay opciones, hay alternativas, sólo se trata de animarse a cambiar para verse mejor.

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