Considerar el calendario permite una organización interna que repercute en el ánimo y en la relación con los demás.

Para lograr una vida plena y feliz a cada día de la semana le corresponde lo que se ha dado en llamar las obligaciones o compromisos espirituales a cumplir. Por lo general cuando se intenta un paso hacia lo desconocido el miedo suele hacer presa del corazón, creando un campo de energía negativa que puede hacer fracasar el intento de cambio. Magos y chamanes otorgan a cada día de la semana una intención que se deberá cumplir para el logro de una vida mejor.

Lunes: La misión es dar
El primer día de la semana de trabajo comporta la obligación de dar. Ello se debe porque el humano tiene un hábito de conservar cosas, guardar dinero, no comunicar ideas, esconder afectos. La vida enseña a mantener la abundancia del universo dando y recibiendo ya que dar y recibir presenta distintos canales de energía. Hay que estar dispuesto a dar, para que se puede recibir en idéntica proporción.

Martes: Causa y efecto
El que siembra vientos recoge tempestades: toda acción humana genera una fuerza de energía que ser revierte en igual cantidad. Por ello se debe elegir acciones que proporcionen felicidad y éxitos no sólo a uno sino a los demás. De este nodo los frutos que se brindan se transformarán en felicidad y éxito en retorno.

Miércoles: El menor esfuerzo
Si se analiza a la naturaleza se verá que ella actúa sin esfuerzo alguno y con despreocupación, en todo lo que hace brotar, crecer y multiplicarse en armonía y amor. Por lo tanto el ser humano debería imitar este accionar porque de este modo el esfuerzo de cada día generaría el mismo logro que la naturaleza obtiene en todo lo que hace.

Jueves: Intención y deseo

En el campo del pensamiento las intenciones o los deseos que se generan conllevan la intima necesidad de hacerlos realidad. En el campo de las posibilidades hay una necesidad de concreción que va organizando los pasos a seguir. Es algo que ya cotidianamente se hace cuando se desea algo y uno pone a trabajar esa inagotable posibilidad para lograrlo para el beneficio no solo propio sino para irradiar felicidad a todo el entorno personal.

Viernes: Despejar caminos

Hay que tener predisposición para estar abierto a cuanto el destino, el karma o la simple vida puede llegar a brindar a cada paso. En el deseo de conocer nuevas cosas se abren las puertas hacia campos desconocidos pletóricos de todas las posibilidades y librarse a esos brazos desconocidos y activar la mente creativa que de este modo se unirá con el progreso del universo.

Sábado: Para brindarse

El significado de esta tarea es darse a los demás. Quizá no se la reconozca a simple vista pero está en cada uno de buscarla e indagarla. Cuando uno se abre y se brinda a los demás el talento propio de cada ser humano se pone al servicio de los demás, y esto hace que el alma se sienta invadida por el júbilo del propio espíritu que es el fin principal de la existencia terrenal.

Domingo: Potencialidad

El hecho de querer crear algo revela una necesidad de potencia como una ex presión pura espiritual hasta hacerla realidad tangible. En el interior de cada uno se elucubran las posibilidades y se sacan fuerzas a veces de no se sabe de dónde, para unirse a la creatividad del universo, como la representación del poder manifiesto de Dios.
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