El partido fue entretenido desde el arranque; primero por la propuesta valiente de ambos y, no mucho más tarde, por la vehemencia que le imprimieron los protagonistas al trámite. Y fue Rosario Central, dentro de ese contexto, el que mejor se acomodó sobre el terreno a la hora de adelantarse; Cervi, muy activo, era un problema para la última línea de River, preocupada también por la actividad de Ruben.
Del otro lado, el equipo de Gallardo encontraba sólo en Mora -sobre todo después de
la lesión de Bertolo- un elemento para complicar; a él se sumaba el empuje de Carlos Sánchez y algunas ráfagas del
Pity Martínez. Pero el primer golpe lo dio el Canalla con un ataque sobre la derecha que terminó en penal (Beligoy vio infracción de Maidana sobre Cervi) que
Ruben cambio por gol con un remate potente.
River reaccionó con personalidad, pero chocó con buenas intervenciones de Caranta y algo de mala suerte: un cabezazo de Mora se desvió en la rodilla del arquero y, un rato después, le tapó un mano a mano a
Boyé tras una perfecta cesión de taco del propio Mora. El equipo rosarino dejaba muchos espacios en el fondo pero River, que no los aprovechaba, encima se quedó con diez antes del descanso por una entrada
irresponsable de Maidana contra Cervi en la mitad de la cancha. En el arranque del segundo tiempo, Caranta se mandó una atajada impresionante ante un derechazo de Martínez. River había salido más decidido y, enseguida, Caranta volvió a participar con efectividad ante otro tiro del Pity.
Pero sobre el cuarto de hora
Alvarez Balanta vio la roja por un golpe a Ruben y la historia empezó a quedar resuelta.
Beligoy echó más adelante a Musto (también mal) pero en su recta final, y con River jugado, sólo quedó tiempo para un golazo de Jonas Aguirre, desde 30 metros, para sellar el 2 a 0 y clasificar a Rosario Central.