Con el
97,15 por ciento de las mesas escrutadas, se registra un empate técnico entre los principales aspirantes al sillón presidencial: el candidato del Frente para la Victoria alcanza el
36,86% de los votos frente al
34.33% de su adversario por Cambiemos. En el tercer lugar se ubica
Sergio Massa (Unidos por una Nueva Alternativa), que supera el 21,34%, un número de adhesiones que será decisivo de cara al balotaje.
Otro de los batacazos de la jornada fue provocado por
Nicolás del Caño(Frente de Izquierda y de los Trabajadores), quien también marcó una diferencia respecto de las elecciones PASO al ubicarse en el cuarto lugar, por delante de
Margarita Stolbizer(Alianza Progresistas). El sexto puesto fue para
Adolfo Rodríguez Saa (Compromiso Federal).
En los primeros minutos del lunes, exactamente a las 00.03, comenzaron a conocerse los resultados oficiales y sobrevino el estupor:
Macri lideraba los comicios. Si bien las especulaciones sobre un balotaje arrancaron temprano, con
un clima festivo en el búnker de Cambiemos en contraste con
las frases mesuradas que partían desde el espacio del Frente para la Victoria, nadie esperaba que Scioli corriera de atrás.
La tendencia volvió a revertirse cerca de la 1.30, cuando las mesas escrutadas comenzaban a pasar la barrera del 80 por ciento. Scioli, quien después de las 22
ofreció un discurso en el que lanzó su nueva campaña, recuperaba el primer lugar con dos puntos y medio menos respecto de las PASO. Macri, ya con la segunda vuelta asegurada, ostentaba 10 puntos más que en agosto.
Con la configuración del nuevo descenario se abre una nueva mesa de negociaciones de cara al 22 de noviembre. En esa dirección, Sergio Massa será el hombre clave en el próximo mes. Tras realizar una performance similar a la de agosto, su espacio asumió rápidamente el tercer lugar y, si bien
no brindó precisiones respecto de sus simpatías de cara al balotaje, su líder
brindó un discurso orientado al cambio.
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