Dice que no existe el ideal: “Están todos cortados por la misma tijera”. Pero cree que su atractivo con el sexo opuesto radica en su personalidad y no en el físico. También comenta que cualquiera puede estar en la tele si gusta

En está oportunidad, Ailén Bechara, que se encuentra de gira con la obra teatral "Enredados", responde a cada uno de los interrogantes que se le plantearon con la sencillez de una chica del interior que en Buenos Aires se topó con la fama y a la que el encandilamiento de la popularidad no la hizo perder de vista su origen.

l ¿Qué se necesita para estar en televisión?

-Cualquiera puede estar en la tele, el tema es agradarle a la gente. Si no les agradás, te ven y cambian de canal.

l ¿Alguna vez pensó dedicarse a otra cosa?


-No. Desde que fui azafata de Guido (Kaczka) tengo en claro que quiero estar en este ambiente que me encanta.

l ¿Qué lugar siente que ocupa en el medio?


-Ni idea, pero me han demostrado que me aceptan. Nunca me he sentido apartada. Me siento muy querida.

l ¿Qué le sugeriría a una chica que desea iniciarse en el medio?


-Lo más importante es ser perseverante.

      Ailen Bechara

l De qué se debe cuidar?

-De las malas personas.

l El de la tele, ¿es un buen o mal ambiente?

-A mi me encanta. Es un ambiente hermoso. Obviamente, debés ser ciega, sorda y muda.

l ¿Con qué clase de gente le agrada estar?

-Con gente con buena energía, que no sea prejuiciosa y que no le guste el chisme ni la crítica.

l ¿Por quién pone las manos en el fuego?

-Por mi mamá. ¿Del ambiente artístico? Por nadie (risas).

l ¿Qué tiene de bueno ser conocida?


-Lo mejor es el cariño de la gente.

l ¿Y qué tiene de malo?

-Que en ciertas situaciones hay quienes opinan de tu vida, sin tener idea de quien sos.

l ¿Sale al cruce de esos comentarios?

-Intento que la gente sepa la verdad, porque no me gusta que piensen de mi, cosas que no son.

l Cuando se siente mal, ¿qué la saca a flote?


-Mis amigas y mi mamá.

l ¿Cómo expresa su bronca?

-Aprendí a no guardarme nada, ni lo malo, ni lo bueno.

l Psíquicamente, ¿cómo cree que se encuentra?


-Pienso que estoy bien. Muchas veces, una se va de su eje y pierde su equilibrio.

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l Anímicamente, ¿cómo se definiría?

-Estoy un poco loca (risas). Soy muy impulsiva.

l ¿Cuál es su sexto sentido?


-Que huelo la buena y la mala energía de la gente.

l ¿De qué es maniática?

-Del orden.

l De las tareas domésticas, ¿cuál detesta?

-Hacer la cama. No me gusta, pero lo hago igual.

l ¿Qué no falta nunca en su cartera?


-Un espejo y un lápiz labial.

l ¿Cuál es el mejor regalo que recibió?

-Al álbum de "El Bailando" que me regalaron para mi cumpleaños.

l ¿Cómo toma los consejos que le dan?

-Bien, pero sé muy bien qué tomar y qué dejar.

l ¿Cómo demuestra su cariño?

-Demuestro mi cariño con palabras, besos y abrazos. Soy de decir: "Te quiero" y "Te amo".

l ¿Qué tiene usted que le encanta a los hombres?

-Creo que mi forma de ser. Gusto más por mi personalidad que por lo externo.

l El hombre ideal, ¿existe?

-No. Están todos cortados por la misma tijera. Son todos son iguales.

l ¿Qué debe tener un hombre para llegar a usted?

-Debe tener sentido del humor, hacerme reír y hacerme sentir cuidada.

l De un hombre, ¿prioriza su aspecto exterior o su mundo interior?


-Todo importa. Cuando buscás alguien con quien estar es porque te ves al lado de esa persona. Si yo cuido mi estética quiero que la otra persona, mínimamente, también cuide su estética.

l ¿Sería capaz de mantener a un hombre?

-Me pasó. Hoy no lo vuelvo a hacer.

l ¿Qué le resta encanto a un hombre?

-Que sea sucio. Eso no lo tolero. Tiene que estar impecable de pie a cabeza y con olor a perfume.

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