El conjunto local echó mano de todo el corazón y empuje ante un rival que en la previa se presentaba como un todopoderoso y en el campo de juego protagonizó un partido vibrante y lleno de emociones.
El campeón escocés abrió el marcador a los tres minutos del primer tiempo luego de un lejano tiro libre y que fue enviado al fondo de la red por Moussa Dembélé en fuera de juego y tras capturar un rebote.
La visita se encontró con el empate merced a un disparo desde fuera del área de Kolarov que fue a parar al brasileño Fernandinho, quien no perdonó ante Craig Gordon.
El premio para el despliegue del local no tardó en llegar en una acción de mala fortuna de Raheem Sterling, quien introdujo el balón en su propio arco al tratar de tapar un centro.
Pocos minutos después apareció la magia del español David Silva, quien metió un balón preciso para Sterling, quien gambeteó al arquero local y anotó.
Dembele completó el doblete al inicio del segundo periodo tras un fallo en el despeje de Kolarov y respondió de nuevo el City, que encontró de nuevo las tablas por medio de Nolito tras un rebote del arquero a un tiro del Kun Agüero.
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