Delincuentes lograron entrar a la vivienda de un fiscal del Fuero Penal Juvenil de Florencio Varela y robaron electrodomésticos y objetos de valor que cargaron en el auto de la víctima, antes de que llegue la policía.

Un fiscal del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil de Florencio Varela fue asaltado en su casa de la localidad de Temperley por al menos dos delincuentes, pero logró esconderse junto a su hijo discapacitado en un vestidor, desde donde pudo llamar a la policía.

El propio fiscal Claudio Cipollone contó que el hecho que se conoció ayer ocurrió el viernes pasado, que se trató de "un robo común" y que los delincuentes lograron escapar con objetos de valor de la casa que cargaron en un auto suyo antes de que llegara la policía.

El episodio ocurrió alrededor de las tres de la madrugada del pasado viernes en una casa de la calle Blanco Encalada al 1400, entre Rosso y Julián de Casal, de esa localidad del partido de Lomas de Zamora, en el sur del conurbano, cuando dos delincuentes lograron ingresar tras romper el vidrio de una ventana trasera de la vivienda.

"Estábamos durmiendo y escucho un ruido en la escalera y pienso que era mi hijo. Por eso me levanto y voy a ver. Pero de pronto me encuentro con un sujeto armado y me amenaza que me va a matar", relató Cipollone en declaraciones a la prensa. En ese momento, aparentemente el delincuente se asustó y bajó corriendo las escaleras."Yo voy al dormitorio de mi hijo, nos vamos a un vestidor y desde ahí llamo a la policía, que vino en tres minutos", dijo el fiscal, quien esta a cargo del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil 1 de Florencio Varela.

Los ladrones se escaparon del lugar en el auto del fiscal llevándose electrodomésticos y otros objetos de valor. "Una heladera, computadora, ropa y otras cosas", contó el damnificado sobre los elementos robados. Más tarde, el vehículo, un Chevrolet Spark, fue abandonado en la esquina de las calles La Calandria y Jujuy, en el barrio San José, también de Temperley. Cipollone explicó que se trató de un "hecho común" y negó que haya sido una toma de rehenes o un secuestro exprés, como circuló en un primer momento. "Nunca estuvimos como rehenes. Porque después de la amenaza del masculino armado, pude meterme con mi hijo en un vestidor", dijo el funcionario. También dijo que, a su criterio, el asalto no tuvo nada que ver con su trabajo como fiscal "porque en el Conurbano suceden todos los días casos como éste". Asimismo, dijo que "no pedimos custodia, ni tampoco voy a poner cámaras de seguridad, porque este episodio es algo que le puede ocurrir a cualquiera". Tomaron intervención la fiscalía de turno de Lomas de Zamora con la comisaría Tercera de Temperley.

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