La Dirección General de Desarrollo Familiar creó este año un área de atención inmediata, con el objetivo de trabajar en la prevención de situaciones complejas de cada hogar.
En algunos edificios de las comunas porteñas comenzó a funcionar el "Espacio Familia", de la Dirección General de Desarrollo Familiar. Y la Comuna 4 tiene tres puestos para recibir a gente de todas las edades que necesitan ser escuchadas y orientadas. La atención es inmediata, gratuita y sin sacar turno. Existe un grupo de orientadores familiares: un staff con psicólogos y personas idóneas para este tipo de casos específicos vinculados a la familia. Entre las diferentes comunas hay 18 orientadores trabajando en la calle. Atienden en avenida Del Barco Centenera 2906 (Nueva Pompeya) los viernes de 10 a 13, en la avenida Suárez 2032 (Barracas) los jueves en el mismo horario y en el Polideportivo de Parque Patricios (Pepirí 135) los martes y viernes de 17 a 19. Además están en cinco comunas más.

Pero, ¿en qué consiste este espacio? La licenciada Marcela Cordaro, coordinadora del Espacio Familia de la Dirección General de Desarrollo Familiar nos explicó. "La Dirección General de Desarrollo Familiar se creó este año con el objetivo de trabajar en la prevención de situaciones complejas que tenga cada familia. La idea es fortalecer el vínculo familia. ¿Y cómo lo hacemos? A través de la orientación a través del Espacio Familia que se está abriendo en cada una de las comunas. Nuestros orientadores escuchan y tratan de ayudar a la gente", expresó Cordaro y siguió con los detalles: "Por ejemplo, alguien llega con una situación problemática familiar que puede ser con la pareja, con los hijos, con los padres o abuelos. Consulta y el orientador lo guía con información. Lo contiene a través del diálogo y de la escucha. Entonces, el ciudadano en ese espacio puede empezar a prevenir situaciones que a la larga se podrían complicar. Puede ser desde un conflicto hasta una necesidad".

Además, comentó quiénes son los que más se acercan a hacer consultas, al expresar: "Se nos han acercado abuelos que están solo y con depresión. Que tal vez no se hablan con sus hijos y no les permiten ver a sus nietos. Los escuchamos y les hacemos propuestas con actividades que tiene el Gobierno de la Ciudad para realizar y sentirse acompañado. Pero al mismo tiempo le damos una herramienta como para poder empezar a generar algo para comunicarse con su hijo. Le mostramos el camino para fortalecer el vínculo y retomarlo. Siempre teniendo en cuenta que no toda las situaciones son iguales. Si es muy compleja, lo derivamos a otro centro. Como es el caso de los padres que se acercan porque hay algún hijo que tiene dificultades de adicciones. En esos casos los derivamos. Pero también pasa que al sentirse escuchado, ese padre vuelve más allá del tratamiento que pueda comenzar su hijo".

¿A quiénes ayuda? A todos... "Buscamos trabajar con todo lo positivo que tiene cada familia. Ayudamos a gente desde los 0 hasta los 99 años. Fortalecer a la familia significa achicar el margen de situaciones de riesgo. Así también habrá menos problemáticas sociales", comentó la Licenciada.
A través de diversas encuestas se conoció las nuevas demandas y necesidades de las familias de la Ciudad para identificar problemáticas y articular acciones de prevención. Padres e hijos que no logran comunicarse es un problema. "Cenar sin el teléfono es un pequeño consejo, pero que puede ayudar a una familia en su convivencia", comentó la Coordinadora Espacio Familia, quien agregó que "empezamos en agosto y la demanda está creciendo". En octubre atendieron cerca de 150 casos.