La medida del Gobierno de Donald Trump de suspender el ingreso de limones argentinos, al menos por los próximos 60 días, ya tuvo réplicas en el sector afectado. El presidente de la Federación Argentina de Citrus, José Carbonell, afirmó hoy que de mantenerse la decisión de la gestión de Donald Trump sería un "golpe" para un sector que invirtió mucho tiempo, esfuerzo y dinero para reactivar esas ventas.
"La noticias nos cayó mal, no tenemos otra manera de recibirla porque teníamos una fuerte expectativa de poder retomar las exportaciones de frutas frescas al mercado norteamericano porque se ha trabajado muy intensamente durante mucho tiempo para poder hacerlo", sostuvo el dirigente en una entrevista concedida a Radio Nacional.
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Indicó que en los últimos quince años junto al ministerio de Agricultura (ahora Agroindustria), el Senasa y la embajada argentina en EEUU los productores han sorteado los obstáculos y las dudas de las autoridades agrícolas y fitosanitarias norteamericanas.
" Hoy tenemos 60 días de incertidumbre", se quejó Carbonell antes de precisar que la zafra limonera en el NOA se inicia en los últimos días de abril y la idea era exportar este año una pequeña cantidad para no generar demasiado ruido en los otros mercados que también le venden a los Estados Unidos.
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