Fútbol
En la previa del partido por Copa Argentina, la cancha de Racing amaneció con pintadas que reavivan la interna en La Guardia Imperial, la barra brava. El encuentro no corre riesgos de suspenderse.
El Cilindro de Avellaneda, el estadio de Racing Club, amaneció con dos pintadas contra la facción oficial de La Guardia Imperial, la barra brava. Los escritos atacan a Huevo, uno de los referentes de una de las bandas, y critican por "mandar a la policía". Esto reaviva la interna que tuvo su punto más caliente semanas atrás, cuando se tirotearon ambos grupos.
"Muchachos abran los ojos, por Racing se pelea no se manda a la policía", decía uno de los escritos mientras que el otro señaló: "Huevo las banderas se defienden, vos corriste".
Las pintadas se suman a la bandera que apareció ayer frente al Hotel Savoy, el lugar donde solía concentrar Racing en la previa del partido ante Gimnasia de La Plata, por los octavos de final de la Copa Argentina, en la cancha de Lanús. La bandera es en clara alusión al ex presidente de Racing Gastón Cogorno a quien los que colocaron el trapo acusan de "cubrir" al que habría asesinado a Nicolás Pacheco y además de hacer negocios con Álvarez, uno de los popes de la barra de Independiente.
El problema es que, según trascendió, la barra disidente de Racing es de Lanús, cerca de la cancha donde esta noche se juega el partido. De todos modos, no hay riesgos de suspensión.
El encuentro por Copa Argentina iba a jugarse el pasado 9 de octubre en la ciudad de Mar del Plata, pero tras una recomendación de la Aprevide se decidió postergarlo porque días antes las barras se habían tiroteado en Avellaneda en la previa al partido ante Patronato.
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