La policía no podía creer la reacción de Katrina cuando le comunicaron que su hijo, Mark Sutton, de 34 años, había muerto. Le explicaron que un cazador francés lo confundió con un animal cuando circulaba con su bicicleta por los Alpes: murió en el acto de un solo disparo. La madre del cicilista respondió: "Es un gran alivio, era un monstruo, me alegro que esté muerto". Es más, lamentó que haya fallecido "sin sufrir".
Katie Toghill, de 32 años, hermana de Mark, afirmó a The Sun que fue víctima de violaciones y agresiones cuando era niña por parte de su hermano ahora asesinado. Sutton, a quien lo calificaron como un "monstruo", se había mudado lejos de su familia tras las múltiples problemáticas que tuvo. Y encontró la muerte de manera imprevista.
"Cuando supe que lo habían matado, sentí un gran alivio, fue una carga enorme para mi espalda. Me sentí aliviada. Merecía ser fusilado como un animal, era el animal más grande que había", señaló Katie. "Fue una pena que muriera tan rápido, me hubiera gustado haber tomado la iniciativa a mí, lentamente, y saber que estaba allí moribundo", dijo ante la sorpresa de muchos.
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