Un anciano, de 76 años, fue víctima de un violento asalto, cuando fue sorprendido por dos sujetos en su vivienda del barrio porteño de Floresta, quienes lograron ingresar al domicilio, mediante una maniobra de engaño para despojarlo del dinero que había cobrado de su jubilación. Además de robarle una suma de 1400 pesos y otros objetos de valor, los ladrones maniataron al hombre con precinto plásticos y lo dejaron atado, para luego escapar sin ser vistos.
El episodio, que es investigado por personal de la comisaría 43ª, se registró en horas de la mañana del miércoles pasado, en una casa de la calle Sanabria al 1700, entre Elpidio González y Juan Agustín García, a pocas cuadras de la cancha del club All Boys. Allí reside el septuagenario, quien se encontraba durmiendo cuando tocaron, en forma insistente, el timbre, pero al preguntar quien era sin abrir la puerta, no recibió respuestas.
De acuerdo a los datos que manejan los investigadores del caso, el jubilado, de nombre Vicente, “aún estaba descansando cuando los asaltantes tocaron el timbre de la casa, por lo que el hombre se asomó por la ventana para ver quién llamaba a la puerta, pero no había nadie y tampoco, previamente, le contestaron”.
“Dame toda la guita”
“Cuando no vi a nadie por la mirilla, me fui hasta la cocina y abrí la puerta del patio para ver si podía observar desde la terraza quién me llamaba, pero cuando subía por la escalera volvieron a tocar el timbre y ahí fui a abrir la puerta, sin tomar otra precaución”, relató la victima, en declaraciones periodísticas.
A partir de ese momento, se desató la odisea para el anciano, ya que uno de los desconocidos lo tomó del cuello y a los empujones lo hizo ingresar a la casa. “Cuando me agarra, me dice `dame toda la guita, toda la plata, todo lo que tenés`”, expresó el damnificado, quien le respondió que no tenía dinero y que era un jubilado.
“El ladrón me tiró al piso y con un cuchillo, que clavaba continuamente en el parquet, me decía `dame todo porque de acá no salís vivo`”, agregó la víctima, aún conmovida por la situación que le tocó atravesar y que se extendió por varios minutos.
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