Sin kirchnerismo, el peronismo convocó a la renovación

"Tenemos que volver a enamorar. Ese es el enorme desafío que tenemos, un peronismo que convoque y que no le tenga miedo a la autocrítica. Un peronismo que escuche y que cambie en función de lo que opina nuestro pueblo", destacó el intendente de Hurlingham, Juan Zabaleta, uno de los principales artífices de esta cumbre y quien tuvo a cargo el cierre del acto en el hotel NH City en el centro porteño.

A su vez, el referente del Grupo Esmeralda invitó a los peronistas alejados del PJ a sellar su regreso al partido para abonar el camino de la unidad, ante la escucha atenta de dirigentes del Frente Renovador, como Alberto Fernández, Felipe Solá y Héctor Daer.

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"Con el peronismo no alcanza, pero sin el peronismo no se puede. Vuelvan compañeros, los brazos están abiertos. ¡Vamos a recuperar la victoria y a gobernar la provincia en 2019!", arengó Zabaleta.

Asistieron entre otros el ex gobernador Daniel Scioli; el presidente del PJ, José Luis Gioja; los gobernadores Domingo Peppo; Gustavo Bordet; Gildo Insfrán y Rosana Bertone; el diputado del bloque Peronista Diego Bossio; los senadores Juan Manuel Abal Medina y Omar Perotti; los intendentes Gustavo Menéndez y Verónica Magario; dirigentes sindicales; y referentes del massismo.

Los organizadores del encuentro fueron los jefes comunales del Grupo Esmeralda, liderados por Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) y Gabriel Katopodis (San Martín), quienes oficiaron de anfitriones del encuentro junto a Zabaleta, y los intendentes Eduardo "bali" Bucca (Bolívar), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), Fernando Gray (Esteban Echeverría), Mariano Cascallares (Almirante Brown), y concejales como Federico Gelay, entre otros.

El encuentro, que sirvió para dar un mensaje de unidad y para reflejar una necesidad de dar una vuelta de página en el peronismo, tuvo como excusa la conmemoración de un nuevo aniversario de la consagración como gobernador bonaerense de Antonio Cafiero, líder de la histórica "Renovación Peronista".

"Vamos a construir un peronismo renovado para ser mayoría. No vamos a dejar a la gente sin alternativa y sin futuro", señaló por su parte Katopodis, y agregó respecto al proceso liderado por Cafiero en los 80: "La renovación tenía el mismo desafío que hoy tenemos nosotros: volver a representar a la mayoría y tener un proyecto superador. El peronismo tiene que tomar las demandas de la gente y proponer soluciones".

"Queremos resaltar lo que fue para nuestro movimiento los principios que movilizó Antonio Cafiero, que nos puso en la victoria en la Provincia de Buenos Aires y desde allí reconstituyó un proceso virtuoso del justicialismo. Ese escenario queremos repetir para recuperar el Gobierno", indicó por su parte Peppo a la prensa, poco antes del comienzo de la actividad.

Se rompió el bloque FpV en la Ciudad

El bloque del Frente para la Victoria (FpV) en la Ciudad de Buenos Aires finalmente se fracturó y ahora quedó conformado por un grupo de camporistas/sabatellistas por un lado y uno peronista por el otro.

La división se hizo notoria cuando se votó la creación de la Agencia de Bienes en junio pasado en la Legislatura porteña, donde se vio al bloque K teniendo dos posturas: una reacia, que votó en contra, y la restante avalando el proyecto del PRO, que finalmente resultó aprobado.

"Debemos ser oposición, pero sin renunciar a ser parte de los consensos parlamentarios", señalaron en su momento los que pasaron a formar el Bloque Peronista: María Rosa Muiños, quien será su presidente, Silvia Gottero y Claudio Heredia.

Asimismo, trascendió que Muiños pondrá a disposición de la Legislatura su cargo de vicepresidenta segunda, por entender que lo ocupaba representando al Frente para la Victoria.

En tanto, el kirchnerismo de la Ciudad quedó conformado por camporistas y sabbatellistas, y tendría como diputados porteños al ex ministro de Trabajo Carlos Tomada, Paula Penacca, Lorena Pokoik, Javier Andrade, Pablo Ferreyra, José Campagnoli, Andrea Conde y Gabriel Fuks.

Justamente, la decisión de Fuks de permanecer en el FpV se conoció a último momento y llamó la atención ya que más allá de estar vinculado con Daniel Filmus se lo tenía como un legislador más cercano al justicialismo puro.

En un comunicado, Tomada "lamentó mucho" la ruptura "luego de una serie de confusas idas y vueltas" y recordó que diez días atrás todos se habían reunido con la ex presidenta Cristina Kirchner "y coincidido con ella cuando señalaba la importancia de la unidad y que estos no son tiempos de disputas de dirigentes"