La final de la Copa Davis significa para el tenista argentino uno de los máximos objetivos de la temporada. Pero, a su vez, y al igual que los Juegos Olímpicos, cambian el panorama, la cantidad torneos a disputar, la preparación y se comienza a especular para evitar un desgaste. Tras la histórica victoria en Gran Bretaña consumada el fin de semana, Leonardo Mayer (114), Guido Pella (49) y Juan Martín Del Potro (64) apuntan a levantar la Ensaladera de Plata. Hay bastante camino antes de enfrentar a Croacia.
"Mi situación no es la que tuve hace varios años cuando estaba en mi plenitud tenística, física y mental. No quedé en condiciones de otro desafío luego de enfrentar a Murray, en el partido más largo de mi carrera", se adelantó Del Potro en la conferencia de prensa que el equipo dio en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, tras arribar al país desde Escocia.
Con la premisa de recuperar su cuerpo, Del Potro anota en la agenda lo que le depararán sus actividades previas al 25 de noviembre -fecha designada para el inicio de la serie ante Croacia-. "Voy a descansar, a hacerme un chequeo en todo el cuerpo para ver los lugares que tengo dolores y ver si son graves o no. Es una final muy importante, pero tenemos el circuito por delante", remarcó.
Cautela y constancia. "Faltan casi dos meses, tenemos que estar tranquilos", insistió. Pero el tandilense, que no defiende ningún punto y tiene una wild card para el Masters 1.000 de Shanghai, no piensa en campeonatos: "Es un buen periodo para mí, para mantenerme sano y seguir mejorando en lo físico. Trataré de llegar lo mejor posible para hacer un papel digno".
Mayer sufrió una lesión en el hombro derecho que en mayo le hizo cambiar el rumbo. Retrocedió en el ranking hasta quedar fuera de los top cien, Daniel Orsanic debió marginarlo de la Copa Davis y Río 2016 se convirtió en una utopía. "Me lo cortaría, me pondría otro, pero no se puede", había dicho en una descripción del dolor que le daba durante su corta experiencia en Roland Garros.
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Retornó en los Challengers y obtuvo Manerbio. Glasgow fue su cúspide. "Dejé mucho para jugarla. Hice un montón de calendarios para jugar la Davis. Este año pensé que no iba a jugarla más, por mi ránking y ahora me veo acá, ganando el quinto partido. Lo voy a disfrutar mucho", comentó el Yacaré.
"Mi calendario va a ser jugar toda la gira Challenger de Sudamérica porque no entro en los ATP y tal vez jugar algún indoor para ir acostumbrándome como hice hasta ahora", detalló el correntino que así tiene en mente al de Campinas, Buenos Aires, Santiago, Lima, Guayaquil, Bogotá y Montevideo.
Por el lado de Pella, decidió seguir su camino por Asia: "La semana que viene voy a jugar Tokyo y Shanghai. Veo si podré jugar el Master 1.000 de París".
Sin embargo, aún tiene una duda. "Veré si dejo esa semana (la del Masters de París que va del 31 de octubre al 6 de noviembre) para empezar una recuperación para llegar bien a Croacia"
Argentina se prepara para su quinta final de Copa Davis, y espera que sea la vencida.