Las divisiones juveniles de Argentino de Quilmes disfrutan de un momento de lujo, pues el equipo de Octava se consagró campeón al vencer en la final de la categoría C a Luján por un certero 2 a 0, algo que le permitió dar la vuelta olímpica y soñar en grande de cara al futuro.
El Mate fue más que su rival en la cancha auxiliar de San Martín de Burzaco y selló una satisfacción que confirmó el andar positivo a lo largo de la compleja temporada en la divisional. Las conversiones correspondieron a Gómez y Cabrera, que rompieron la red y le dieron rienda suelta a la felicidad para el equipo de la región.
Ahora los protagonistas estarán de vacaciones, en pleno descanso, y se perfilarán para el campeonato venidero, en el que intentarán revalidar credenciales para sorprender a propios y extraños en el terreno de juego.
El trámite no se vislumbrará de forma sencilla, pero los jóvenes ya saben que allanan su camino para dar el salto de calidad hacia el plantel profesional con el envión de un título, algo que hace de Argentino un club totalmente satisfecho.