
YPF aumentó un 21% su ganancia operativa gracias al crecimiento del shale oil, la mejora en la eficiencia y la reducción de costos.
YPF cerró el tercer trimestre de 2025 con ganancias récord por USD 1.357 millones, lo que representa una suba del 21% interanual, según informó la compañía. El resultado, medido por su EBITDA (ganancias antes de impuestos, intereses y amortizaciones), refleja la mejora en la eficiencia de sus operaciones, la reducción de costos y el fuerte impulso de la producción de shale oil en Vaca Muerta.
La petrolera alcanzó una producción de 170 mil barriles diarios, un aumento del 43% respecto del año anterior, incluso tras la venta del 49% del bloque Aguada del Chañar. En octubre, la producción continuó creciendo hasta los 190.000 barriles diarios, cumpliendo de forma anticipada la meta fijada para fin de año.
El shale oil representa ya el 70% de la producción total de petróleo de la compañía, lo que permitió compensar la disminución progresiva de los campos convencionales. “Esta estrategia, que combina el crecimiento del shale y la salida de los campos maduros, permitió mejorar los costos y el EBITDA en unos 1.300 millones de dólares anuales respecto de hace dos años”, destacó YPF.
Durante el trimestre, la empresa alcanzó hitos técnicos en Vaca Muerta: completó el pozo más largo hasta la fecha, con 8.200 metros de longitud, y perforó otro de casi 6.000 metros en apenas 11 días, lo que evidencia avances en automatización, estandarización y velocidad de ejecución.
Las inversiones totales ascendieron a USD 1.017 millones, de los cuales el 70% se destinó a proyectos no convencionales. La compañía subrayó que este enfoque no solo redujo los costos de extracción en casi 30%, sino que consolidó un modelo de crecimiento sostenido basado en eficiencia y tecnología.
En paralelo, la actividad de refinación también mostró resultados positivos. Las ventas de combustibles crecieron 3% frente al trimestre anterior y las refinerías operaron en su mayor nivel de procesamiento de los últimos 15 años, reforzando la integración entre producción, refinación y comercialización.
Con estos resultados, YPF consolida su recuperación y reafirma su papel como motor del desarrollo energético del país, en un contexto donde el sector busca aumentar exportaciones y generar divisas.