El caso de los Agustines, los chicos asesinados a golpes a un costado de una ruta provincial en cercanías de la ciudad bonaerense de Benito Juárez, continúa impune, pese a la tenaz luchas de las madres de ambos, quienes lanzaron un petitorio (que ya reunió más de 1500 firmas) para ser presentado ante las autoridades para reclamar que se agilize la investigación, participaron con la bandera reclamando justicia en el desfile por el 150mo. aniversario del pueblo y ayer se reunieron, en La Plata, con el Procurador General de la provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand, quien se comprometió a encargarse de constatar en que estado se encuentra el expediente que investiga este trágico episodio. Desde la carpa que montaron en la plaza central de Benito Juárez, Alejandra Bustos y Daniel Guzmán, las mamás de Agustín Rodríguez y Agustín Bustos, siguen esperando la respuesta a su demanda de “verdad y justicia”, desde aquella madrugada del último 9 de enero, cuando los adolescentes, ambos de 15 años, fueron hallados por un camionero, tirados a la vera de la ruta 86, presentando golpes en la cabeza e inconscientes. Uno de los Agustines murió a las pocas horas y su amigo, siete meses más tarde, luego de sobrevivir en un hospital de Bahía Blanca.
Unidas por el dolor, las jóvenes mujeres emprendieron una cruzada para llegar al esclarecimiento de lo sucedido, en una causa que es investigada por la Fiscalía de Azul (a cargo de Laura Margaretic) y que, en la actualidad, no tiene detenidos, ni sospechosos, ni siquiera una pista firme. Poco tiempo atrás, se entrevistaron con el intendente de Benito Juárez, Julio César Marini y más tarde, fueron recibidas por el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, pero todas las promesas que escucharon hasta el momento no se transformaron en hechos concretos.