Por un pedido de uno de los defensores, los magistrados decidieron que el proceso oral y público empiece en una semana
Siete barras bravas de River, entre ellos los dos cabecillas de una de las facciones, comenzaron a ser enjuiciados en un proceso oral y público por el asesinato del hincha Gonzalo Acro, pero por un pedido de uno de los defensores, las audiencias se postergaron para el miércoles 23.
Alan y William Schlenker, sospechados de ser los instigadores del homicidio de Acro, un lugarteniente de Adrián Rousseau, el entonces jefe del otro grupo de los Borrachos del Tablón, llegaron al juicio en libertad, lo cual levantó las sospechas del padre de la víctima.
“Me parece que el paquete está cerrado”, deslizó Alberto Acro, como lanzando la sospecha de que zafarán de la prisión perpetua que pedirán, según adelantó el abogado de la familia de la víctima, Aníbal Mathis, quien aludió a una “justicia para ricos y otra para pobres”.
Es que los Schlenker son de una familia de clase media alta, en tanto que los otros imputados, Pablo “Cucaracha” Girón, Sergio “Pelado” Piñeyro, Ariel “Colo” Luna, Martín “Pluto” Lococo y Rubén “Oveja” Pintos llegaron al proceso oral en calidad de detenidos.
Por ende, la guardia periodística sólo pudo ver ingresar a los Schlenker. Primero a Alan, corpulento, vestido con una camisa a rayas finas, y unos minutos después a William, con una campera liviana color marrón claro y anteojos de sol.
Una vez que los miembros del Tribunal Oral Criminal (TOC) 15, integrado por los magistrados Héctor Grieben, Javier Anzoátegui y Hugo Decaría, hicieron lugar al pedido del abogado de uno de los imputados y dispuso el cuarto intermedio hasta el miércoles 23, los dos volvieron a salir en direcciones distintas.
Alan espantó los micrófonos que se le cruzaban como si estuviera en medio de un enjambre de moscas y miró fiero cuando un periodista se le cruzó en busca de una declaración. William bajó la cabeza y tomó hacia la otra dirección por el 1100 de la calle Lavalle, donde se encuentra la sede judicial.
El letrado de uno de los imputados fundamentó su pedido de postergación en el legítimo derecho a la defensa, argumentando que como hace poco tomó la representación del imputado, no alcanzó a leer las fojas de la larga instrucción.
En tanto, el abogado Salvador Heredia, defensor del “Colo” Luna, imputado por ser supuestamente ejecutor del disparo que mató a Acro, pidió que se le niegue a Romina Acro, hermana de la víctima, ser tenida en cuenta como querellante. Acro, lugarteniente de Adrián Rousseau, el entonces jefe de la facción contraria a los Schlenker en “Los Borrachos del Tablón”, fue emboscado junto a Osvaldo Matera la noche del 6 de agosto de 2007 en Bauness y Cullen, del barrio de Villa Urquiza, a poco de salir del gimnasio que frecuentaba. Dos balazos le perforaron el cerebro y otra bala le dio en la pierna. Treinta horas después murió en el hospital Pirovano. El padre de Acro aseguró hoy que su hijo le había confiado a otras personas que si le “pasaba algo, era Alan”.
comentar