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Además, los nuevos dueños de la ahora ex Indalo, rebautizada como Ceibo, le pidieron al juez Julián Ercolini, que los deje llamar a una convocatoria de acreedores, y así liberar las cuentas del grupo para poder concretar la venta de Cristóbal López a Ignacio Rosner.
Los nuevos dueños de la ahora ex Indalo, rebautizada como Ceibo, le pidieron al juez Julián Ercolini, que los deje llamar a una convocatoria de acreedores, y así liberar las cuentas del grupo para poder concretar la venta de Cristóbal López a Ignacio Rosner. Si bien la mayoría de los empleados cobrarían en lo inmediato, la situación de Marcelo Tinelli se empeoraría. Sería el último en cobrar y para colmo Ceibo se quiere quedar con el nombre del programa.
Como la relación entre el conductor y Rosner nunca fue buena, en materia empresarial esas peleas se cobran al mejor postor por lo que Ceibo no le libraría el título del programa ShowMatch a Tinelli aludiendo que la marca se compró con Ideas.
El animador, en la primera reunión que mantuvo con Rosner, terminó en un cortocircuito total. Rosner asumió tres meses atrás, aunque la justicia todavía no aprobó la venta porque su anterior dueño tiene pleitos con la justicia por una millonaria evasión fiscal.
Según Tinelli, Rosner le aclaró que no se le pagaría la deuda total que él reclama por un monto de 80 millones de dólares en concepto de cachet y por la venta de Ideas del Sur. Desde entonces, no se vieron más. Claramente, la relación es tan mala que Ceibo ahora no le daría a Tinelli el título del programa ShowMatch, cuando el conductor conforme su nueva productora.
Ceibo copiaría la misma estrategia de Telefé, cuando Tinelli pasó a Canal 9 en el año 2005. El canal de San Cristóbal se quedó con el título de Videomatch por lo que Tinelli debió renombrar a su ciclo con Showmatch. Hizo un intercambio de palabras y sonó casi igual.
El año que viene en El Trece, Tinelli estaría obligado a cambiar de nuevo de nombre de programa si es que la justicia no interviene antes y con celeridad. Igualmente para Tinelli tampoco sería un escollo, y aquel no es el nombre lo que vende el ciclo sino él mismo. Seguramente, le encontrará la vuelta y, en verdad, el nombre del programa no es el principal problema que padece Tinelli con Ceibo.