El ex delantero de la Selección se alejó del fútbol hace dos años. El 2 de octubre será trasplantado y podría volver a jugar.
Vaya historia, la de Luciano Galletti. Hace dos años, cuando tenía 30, una insuficiencia renal lo obligó a abandonar el fútbol. Desde entonces afrontó la pelea por la recuperación y decidió trasplantarse. El donante será su papá, Rubén Horacio, que se destacó en los 70 como goleador de Boca y -especialmente- Estudiantes, el club donde surgió el "Huesito", la misma institución donde todavía sueña con retirarse.
"Si sale todo bien, al mes o 20 días podría entrenar de a poco. Y al mes y medio podría empezar a entrenarme con un equipo. Los médicos me dijeron que si todo está bien puedo volver a jugar al fútbol de manera profesional", reveló Galletti en diálogo con TN.
El ex delantero de la Selección Argentina, donde jugó 13 partidos y marcó un gol, será intervenido el 2 de octubre en el Instituto de Nefrología Nephrology de Buenos Aires. "Mi papá es el donante porque hicimos los estudios de compatibilidad y salió todo bien. También fue deportista y su riñón está en muy buen estado", señaló.
Galletti reveló que su idea es retomar la práctica profesional del fútbol. "Y ojalá pueda volver a hacerlo en Estudiantes. Siempre dije que me quería retirar con la camiseta de Estudiantes", concluyó.
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