Los violentos incidentes ocurridos durante el segundo tiempo del partido Boca- River fueron orquestados con una sincronización casi perfecta desde sectores de la tribuna local. Los petardos y las bengalas fueron encontrados en baños y habrían sido introducidos la noche anterior en ese lugar, donde secuestraron gran cantidad de ellos. El jefe de seguridad del club no sabe nada de esto o hubo zona liberada, que es lo más probable. El encuentro fue suspendido durante varios minutos. No hubo detenidos. Luego se reanudó pero el partido se desnaturalizó, todo fue confusión, incluso se volvió a parar porque seguían arrojando petardos, tiros, bengalas, piedras, desde la tribuna local y había peligro para la integridad física de los jugadores. No olvidemos que hace años, en un partido nocturno entre Boca- Racing, desde la tribuna local fue arrojada una bengala que mató a un hincha de Racing. De esto nunca más se habló... Hay pruebas suficientes: la transmisión de la televisión, videos, informe del árbitro y veedores; para aplicar sanciones ejemplares. Será así o esto termina como si no hubiera pasado nada. La AFA admitió que Boca podría jugar en su cancha sin público. Algo tan insólito como absurdo después del horror vivido.