A SUNCION, Paraguay.- En la pálida noche que tuvo Racing desde lo futbolístico, la buena noticia pasó por la reaparición de Lautaro Martínez, quien volvió a jugar tras casi cuatro meses de ausencia por la fractura del quinto metatarsiano del pie izquierdo. Y aunque participó poco y nada del partido (algo más de media hora), al menos encendió la ilusión, ya que se espera su presencia, desde el arranque, en la revancha. En contrapartida, quedó en evidencia el fastidio de Lisandro López con el técnico Diego Cocca, quien decidió cambiarlo cuando faltaba un cuarto de hora.
Licha no tuvo una buena actuación y en realidad sólo se sostuvo en el campo de juego por su condición de ídolo. Sin embargo, cuando le tocó salir para dejarle su lugar a Pablo Cuadra, mostró claramente su enojo, esquivó el saludo del DT y se fue a sentar solo, a un costado del banco.
En fin, una noche rara, que también tuvo una discusión entre el arquero Juan Musso y Lucas Orban por una salida en falso desde el fondo: y la tercera amarilla para Miguel Barbieri, que no podrá jugar la vuelta.