Fútbol
“Sería un sueño jugar con Messi”, se ilusionaba mientras militaba en Instituto. Martino lo incluyó en la lista de la Selección, pero hace más de tres años que esperaba este momento. Descartó ofertas para vestirse la italiana y se afianza en la Juventus
Paulo Dybala se presentaba como una promesa para el fútbol argentino. Una joya. Pero no lo hacía desde las luces de la Primera A, sino desde la B Nacional, con el Instituto que persiguió a River hasta el final de su temporada en la segunda categoría. Ese año su nombre comenzaba a sonar en la Selección y hacía ruido en Europa. Con apenas 18 años, se ilusionaba: "Sería un sueño jugar con Messi". Bueno, ante Ecuador o Paraguay cumplirá su deseo.
El zurdo, nacido el 15 de noviembre de 1993 en Laguna Larga, comenzó su carrera en el Club Atlético y Biblioteca Newell´s Old Boys de esa localidad. Allí es ídolo y cada vez que pasea por las calles, cientos de chicos se le acercan para pedirle una firma.
Pero el desequilibrio que demostraba en cada partido no tardó en llamar la atención del Albirrojo, que lo albergó durante su tiempo de formación hasta la llegada a la Primera, en aquel equipo dirigido por Darío Franco. El técnico decidió ponerlo en la cancha el 12 de agosto de 2011, en la victoria 2 a 0 ante Huracán y en el encuentro siguiente, ante Aldosivi, marcó su primer tanto.
Con 17 goles terminó como el cuarto artillero del torneo (anotó un triplete contra Atlanta) y aquel Instituto, que peleó el torneo hasta la última fecha con River, Rosario Central y Quilmes, debió jugar la promoción ante San Lorenzo.
Fue derrota 2 a 0 en Córdoba y empate 1 a 1 en Buenos Aires. El Cuervo apagaba su propio incendio. Dybala se iba al vestuario con un llanto desgarrador.
"Me dijeron que Sabella dijo algo sobre mí y eso quiere decir que estoy haciendo las cosas bien. Tengo que seguir como hasta ahora y obviamente que sería un sueño jugar con Messi, compartir un plantel o un entrenamiento con el mejor jugador del mundo sería un sueño cumplido", le decía a ESPN Radio en marzo de 2012. Deseaba estar en la Selección para las eliminatorias de Brasil 2014. Finalmente nunca fue convocado.
A pesar de un interés del poderoso Barcelona, fue Palermo el club que desembolsó los euros necesarios para quedarse con él en 2012. Jugó 89 encuentros, marcó 21 tantos e incluso logró el ascenso a la Serie A
Su nombre rondó entre rumores como un posible refuerzo para la delantera mundialista, aunque se diluyó y nuevamente tuvo que esperar. La Copa América de Chile se mostró como una nueva meta para la Joya, pero en los pocos cambios que determinó Gerardo Martino no estaba incluido.
La prueba de variantes y el objetivo cercano de los Juegos Olímpicos de Rio 2016, más la vista en Rusia 2018, generaron que el actual jugador de Juventus sea un plan de ataque junto a su ídolo, Messi.
El joven que descartó jugar con la camiseta de Italia ahora sueña en grande, luego de tantos goles y espera.
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