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El mono, que causó sorpresa pero también preocupación, apareció con un cuchillo en una vivienda de la localidad de Corrente, en el nordeste de Brasil.
El pequeño animal tenía entre sus manos una cuchilla o faca que agitaba mientras una cámara lo grababa. Poco después desapareció y se lo volvió a ver más tarde, sin la faca, pero sacudiendo ropa o unas mantas que estaban colgando de una soga.
Para la mayor tranquilidad de los vecinos, el mono capuchino fue finalmente capturado el viernes 24 por especialistas de Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad (Icmbio), en una acción conjunta con el Departamento de Medio Ambiente de Corrente.
Según fuentes del operativo fue confiado al Bioparque Zoobotánico, un refugio de animales silvestres en la localidad de Teresina.
El primate, al que bautizaron "Chico", es un mono adulto de aproximadamente dos años. Las imágenes del simio con el objeto cortante en sus manos se viralizaron y dieron la vuelta al mundo.
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