Un alumno de 19 años comenzó a los tiros en un colegio de Tigre después de pelearse con un compañero, ir a su casa, tomar un arma, y volver a la escuela para iniciar la balacera que, por fortuna, no se cobró ningún herido.
Todo empezó cuando un estudiante de la Escuela 11 Carlos Octavio Bunge, de Troncos del Talar, identificado como Gastón Omar Vega, se peleó con otro por una silla.
Enojado, el adolescente se fue en horas de clase a su vivienda, tomó una pistola, volvió al recinto y disparó al menos tres veces, dos dentro del aula y una en el pasillo.
“Una bala le rozó la cabeza”, contó Edith, la hermana del compañero que milagrosamente salió ileso tras los impactos.
El episodio ocurrió pasadas las 13 y testigos aseguran que el alumno apuntó al compañero con el que había discutido, pero, a raíz de la impericia en el manejo del arma, los impactos dieron en una pared, una ventana y en la preceptoría.
Tras el incidente ocurrido, los docentes pudieron calmar al alumno y llamaron a la policía, que lo redujo y lo traslado a la seccional segunda de la comisaría de Tigre. Allí el el fiscal de Talar de Pacheco, Marcelo Lloret lo acuso de tentativa de homicidio agravado.
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