El cadáver pertenece al alemán Manfred Fritz Bajorat, quien tendría varias semanas muerto dentro de la errante nave.
Pero todavía no han sido determinadas las causas de su muerte, según el portavoz de la Policía, que señala la posible actuación de un tercero.
"Es un misterio para nosotros", manifestó el agente. Los policías le han encontrado sentado en su despacho, con la cabeza como si siguiera dormido y momificado absolutamente.
La Policía todavía no ha podido verificar el tiempo exacto que el velero estuvo a la deriva y cómo murió su capitán. De este último, se conoce únicamente que su único contacto data de hace un año a través de Facebook con un familiar, según han informado medios de comunicación locales.
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