Todo el mundo conoce a Salvador Dalí como un prestigioso pintor, escultor, escenógrafo y escritor, es decir un artista completo. Lo que se desconoce respecto a este referente del surrealismo es que en 1969 colaboró con la empresa Chupa Chups para hacerla conocida mundialmente.
Fiel a su estilo, Dalí ideó un logotipo que representaba una margarita con el nombre de la compañía en el centro. Además eliminó el color negro de la paleta para remplazarlo sólo por el rojo y amarillo de la bandera española.
La historia indica que luego que el fundador de la empresa Enric Bernat le encargase la imagen a Dalí, el artista cumplió con su tarea en menos de una hora.
Además el bigotón tuvo una idea revolucionaria, que el logo se ubicase en la parte superior del caramelo para que fuera más simple reconocerlo internacionalmente.