VALENCIA, España.- Es una buena señal. En tiempo de reestructuración y cambio, un título para la selección Sub 20 marca que se puede recuperar parte del terreno perdido. El juvenil argentino, el grupo que de Lionel Scaloni armó de un día para el otro con la base de los sparrings mundialistas, se quedó en el tradicional torneo de Alcudia. En la final superó 2 a 1 a Rusia, tras empezar perdiendo, con goles de Facundo Colidio y Alan Marinelli. Hay futuro.
La mano empezó complicada para Argentina. Conociendo las virtudes de un rival poderoso en el juego aéreo, la premisa era no cometer infracciones que generen jugadas de pelota parada. Sin embargo, hubo una falta innecesaria de Elías Pereyra con el rival de espalda y eso fue letal. Porque llegó el centro de Maksim Glushenkov, la gran figura del torneo, y el salto libre del central Igor Diveev para marcar el primer gol de la final en el minuto once.
Lo positivo para Argentina fue que, a través de la misma vía, llegó rápidamente al empate. El tiro libre del cordobés Gonzalo Maroni viajó directo hacia la posición del arquero Viacheslav Grigorian quien atrapó el balón bien arriba pero chocó contra su palo izquierdo y perdió la estabilidad y el balón. Allí, con olfato de goleador, apareció el rafaelino Facundo Colidio para empujar al gol.
Enseguida hubo otro llamado de atención con otra pelota detenida que terminó con un cabezazo hacia atrás de Gastón Avila que dio en el travesaño, pero a partir de ese momento todo pasó a manos de Argentina.
Se hizo gigante Agustín Almendra, con todo el panorama claro, el resto se acopló y el equipo alcanzó en el segundo tiempo el mejor rendimiento del certamen.
Y si bien no lo pudo definir en los ochenta reglamentarios, en el suplementario, y con el rival con diez jugadores, llegó al gol del título con una definición del rosarino Alan Marinelli ingresando por el segundo palo.