Lo primero en lo que hay que fijarse es en
cómo se comporta. El canario que está sano es vivaz, alegre y juguetón, le gusta mirar todo e incluso interactuar con las personas. Por eso, no conviene comprar ejemplares que permanezcan apáticos o taciturnos, sin apenas moverse, ya que éste es uno de los signos que más claramente demuestran que el canario no goza de buena salud.
La mejor época para comprar un canario es entre los meses de
noviembre y marzo, ya que han
superado el período de muda y por eso están en posesión de todas sus facultades cantoras. De ese modo, será posible hacerse una mejor idea de sus cualidades para el canto y de la versatilidad del mismo, para decidir cuál es más agradable. Al igual que ocurre con otras especies, los canarios que más se parecen a sus antepasados son los más resistentes, mientras que aquellos que sufrieron más variaciones tienen una salud más frágil. Por eso aquellos que presentan un plumaje verde claro con manchas amarillentas o aquellos que presentan un tono verde gris son los más robustos, ya que son los más parecidos a los primeros que aparecieron en Islas Canarias.
Cuando un canario está sano, se puede disfrutar de su canto tanto como de la vitalidad y alegría del animal. Sin embargo, si contrae alguna enfermedad, se volverá callado, apático y perderá el apetito.
Existen algunas
enfermedades que se dan más comúnmente en estos animales, y que se pueden identificar por sus síntomas. De esta forma será posible ayudar a la mascota a tener una mejor calidad de vida.
Los
piojos suelen aparecer sobre todo en verano, y la causa puede ser la falta de higiene de la jaula. Si el canario contrajo piojos, se lo observará rascarse, especialmente en la zona del cuello, debajo de las alas y cerca de la cola. Si se rasca continuamente, se lo puede tomar con la mano y soplar suavemente. De ese modo, se podrán ver tanto los piojos como sus huevos. En este caso, el veterinario recetará un preparado anti ácaros, para espolvorear tanto en las plumas como en la jaula del animal, después de una limpieza a fondo.
La
diarrea es otra de las posibles enfermedades que suelen estar causadas porque el agua está en mal estado, un exceso de hojas verdes en la dieta o porque la jaula está expuesta al sol. Si la diarrea es muy frecuente, el veterinario recetará un anti diarreico al animal. Si no, se deberá limpiar bien los comederos y bebederos de la jaula, evitar darle frutas y verduras y asegurarse de que tiene acceso a abundante agua, para evitar que se deshidrate.
También
se pueden resfriar. Esto sucede cuando la jaula está en la corriente o si se cambió bruscamente de temperatura al animal. Entre los síntomas más comunes está el movimiento repetido de la cabeza, lagrimeo de los ojos y aparición de mucosidad en las fosas nasales. El veterinario le prescribirá, si es necesario, un antibiótico y habrá que resguardarlo de las corrientes y los cambios de temperatura. Es importante tener en cuenta que el canario como cualquier otro animal necesita de cuidados, por lo que es bueno estar pendientes de que esté bien.
Se alimentan básicamente de semillas como el alpiste, el mijo y la avena. Es imprescindible
que no les falte el agua. Se debe
limpiar constantemente la jaula para evitar enfermedades.
TIPS
-Los cachorros que son mezcla de razas distintas sufren menos
enfermedades congénitas que los perros con "pedigree". Sin embargo, no
se puede predecir su apariencia o temperamento en la edad adulta.
-70 por ciento de los traumatismos y lesiones sufridos por los perros que no están aislados en chacras rurales, son originados por accidentes de tránsito. La calle suele ser muy peligrosa para estos animalitos.
Más que semillas
-Si se desea darles algo más que semillas a los canarios, lo mejor es acudir al veterinario para que indique la dieta apropiada, ya que su digestión es sensible a los cambios.
¿Conviene separarlos?
-No conviene separar a un gatito de su mamá antes de las seis semanas de vida, para que adquiera la inmunidad de la madre a través de su leche. Es la mejor medicina preventiva.
Animalitos muy amigables que viven en coloniasdLos canarios, como los humanos y otras especies, tienen muy claro cuál es su territorio y si notan que pueden perderlo reaccionan de diferentes maneras, entre las que se incluye la violencia. No hay que pensar que los canarios son ermitaños o disfrutan la soledad. Por el contrario, bien adaptados en su medio les encanta vivir en colonias, son amigables, colaboradores y tienen un buen carácter.
Idealmente quien se decide por los canarios como mascotas, debe tener tiempo o destinar un porcentaje de su tiempo al cuidado de los mismos. Esto no sólo implica mantener limpio su entorno sino también cuidar de su salud en todos los sentidos, incluido el psicológico. Aunque pueda acostumbrarse a la soledad durante algún tiempo, si la opción de mascota es un canario, conviene ir pensando que lo saludable será siempre tener dos. Una pareja de canarios es una buena elección, ya que pueden acoplarse perfectamente para convivir en armonía y si son macho y hembra aumentará la familia bastante pronto.
La soledad puede hacer que estos animales se entristezcan y se terminen enfermando. Tampoco hay que irse a los extremos; mantener muchos canarios juntos en una misma jaula puede hacer que éstos tengan muy poco espacio y que no se puedan mover a gusto, lo que implicará una insana tristeza.
Si la jaula lo permite, lo mejor es mantener una media de 5 canarios por jaula y que la misma tenga todo lo que se requiere para esa cantidad de animales, de lo contrario el canario se verá afectado por la multitud.
Además, hay que tener en cuenta que los machos son pequeños pero pendencieros. Defienden su territorio con el canto, pero no dudan en recurrir al empleo del pico si hace falta. Les gusta dormir solos y necesitan un lugar de descanso propio. Por eso dos machos no pueden compartir la misma jaula. Para que un canario cante tiene que estar contento, y eso se logra con una buena jaula, no tiene por qué ser gigantesca, pero tampoco diminuta.