La película del director Daniele Luchetti dedicada al Papa Francisco, con Rodrigo de la Serna en el papel Jorge Bergoglio durante su juventud, no lo mostrará como "un santito", manifestó Pietro Valsecchi, productor del film.
El desafío "es ir más allá de una figura ya casi santificada, para relatar el ser humano y los puntos de inflexión en su vida", agregó
La película, en la que el chileno Sergio Hernández encarna a Jorge Bergoglio en la madurez, se está filmando en Roma en estos días. La producción costará unos 13 millones de euros y se filma en español, con el objetivo de llegar a las salas de cine en diciembre, y luego a la televisión
"Chiamatemi Francesco" (Llámenme Francisco), terminará de rodarse el mes próximo después de 17 semanas, con locaciones en la Argentina (Buenos Aires y Cafayate), Alemania (Augsburg) e Italia (Roma y Turín)
"Era importante salir poco antes del Jubileo y del cumpleaños del Papa (ambos en diciembre, NDR) -dijo Valsecchi-. Me gustaría que el preestreno fuera en Washington o en el Vaticano, en la sala Nervi, como habíamos hecho para la miniserie sobre (Karol) Wojtyla'
"La nuestra no es una 'instant movie'. La preparación duró más de un año, entre investigaciones y varias versiones del guión, realizadas reuniendo en la Argentina muchos testimonios de quienes lo conocieron, desde sus alumnos hasta los curas en la calle", agregó el productor
El set romano se encuentra en un departamento del barrio EUR, donde Luchetti acaba de filmar una escena entre Esther Ballestrino (Mercedes Morán), gran amiga del Papa, intelectual marxista entre las fundadoras de las Madres de Plaza de Mayo, y su hija adolescente, herida y temblorosa, recién liberada por los militares
"La primera vez que presté atención a Bergoglio es cuando dijo aquella frase sobre los gays ('¿quién soy yo para juzgar a un gay", NDR)", explicó Luchetti. "Me conmovió, porque comprendí que a esa apertura de la Iglesia seguirán otras igualmente fuertes. Estaba hablando como contemporáneo a contemporáneos, estaba dando un paso hacia la realidad. Es un Papa que sabe transmitir emociones también al mundo laico'
El "biopic" de Luchetti, que va desde la juventud de Bergoglio hasta su elección como Papa en 2013, cuenta entre otras cosas su reunión en los años 60 con el joven Jorge Luis Borges, a quien envió para una lección en el colegio donde enseñaba, causando escándalo
El film se detiene en el período de la dictadura en la Argentina, cuando el entonces provincial de los jesuitas locales tuvo que hallar un camino para tratar de salvar gente
Sigue luego a Bergoglio por un tiempo en Alemania y su regreso a la Argentina, con el apostolado en las "villas", las barriadas pobres de Buenos Aires
El punto focal que "me convenció de hacer el film fue un testimonio de Bergoglio en un juicio por desaparecidos, de hace diez años. Allí entendí que entonces era una persona lejana de la que conocemos, sentía todavía la presión de los dramas en su vida. Usé eso como punto de partida, siguiendo su relato de aquellos años", contó el realizador
"'Llámenme Francisco'" es una biografía hipotética que recompongo eligiendo acontecimientos reales y encuentros importantes como aquellos con Esther, el padre espiritual Franz Jalics (Alexander Brendemuhl), uno de los dos jesuitas secuestrados durante la dictadura, y su gran amiga Alicia Olivera (Muriel Santa Ana), primera jueza del fuero penal en la Argentina", agregó
Este "no será un film religioso, sino sobre una persona para quien la religión fue motivo de vida, de esperanza, de fuerza, y que la comunicó a otros'
Luchetti agregó que no quiso reunirse con el Papa antes de filmar, para no dejarse influir por cómo es hoy, aunque Bergoglio está informado del proyecto.
Fuente: ANSA