En los últimos ocho años Parque Patricios experimentó un cambio paulatino, pero notorio, a partir de una decisión política que influyó en la vida del barrio, o de parte de él. Fue a partir de la instalación del Distrito Tecnológico.
¿Qué es? ¿Adónde se encuentra? Es un centro de promoción y desarrollo de tecnología, innovación y conocimiento, que concentra empresas de tecnologías de la información y las comunicaciones, software y profesionales de alto valor agregado.
Desde su creación en el año 2009, casi 250 empresas se han radicado en este Polo que generó más de 12 mil empleos. Abarca 200 hectáreas, que, además de Patricios, incluye a parte de Nueva Pompeya y Boedo. El perímetro está marcado por las avenidas Sáenz, Boedo, Chiclana, Sánchez de Loria y Brasil, las calles Alberti y Manuel García y la Avenida Amancio Alcorta.
En Parque Patricios aún se goza de la vida de uno de los barrios tradicionales de Buenos Aires, con vecinos yendo a hacer las compras al almacén, riguroso respeto a la hora de la siesta y hasta el uso de algunas calles (pocas) sin tránsito para jugar a la pelota.
Sin embargo, algo está cambiando. A menos de una década de su fundación, el Distrito Tecnológico ya genera un proceso de transformación en la zona. Sucede que estas empresas de informática y las universidades comenzaron a generar movimiento.
El lugar se está consolidando como un polo al cual el Gobierno porteño quiere transformar en un clúster (grupo de empresas interrelacionadas que trabajan en un mismo sector industrial y que colaboran estratégicamente para obtener beneficios comunes) donde crezcan las empresas, emprendedores, universidades y el propio Poder Ejecutivo comunal. Por otra parte, la creación del área permitió la renovación en el barrio tanto en infraestructura como en servicios para la comunidad.
¿Por qué muchas empresas deciden mudarse a este distrito? Porque gozan de ciertos beneficios como un menor costo de alquiler y carga impositiva, la concentración de recursos humanos (tanto de profesionales como de los estudiantes que lo serán en el futuro), los incentivos fiscales y de infraestructura, la exención del impuesto a Ingresos Brutos y ABL por 10 años o más, la exención del impuesto de sellos y del pago del Derecho de Delineación y Construcciones por 10 años.
A esto se suman las líneas de crédito preferenciales del Banco Ciudad y los subsidios para la obtención de certificaciones de calidad en el distrito.
Finalmente, en Lavardén al 300 sobresale la flamante sede del ITBA, Instituto Tecnológico de Buenos Aires. Adentro, el predio está lleno de aulas y laboratorios. Afuera, el movimiento de camiones es constante y se incrementó al que ya había por los depósitos. Así, con empresas y casas de estudios vinculadas a la tecnología, Parque Patricios está teniendo un cambio, y los vecinos lo notan.