"Pedimos que midan con la misma vara y que sea igual para todos", reclamó el capitán del Granate en relación a lo sucedido ante Sarmiento de Junín.
En Cabrero y Guidi no baja la espuma por un tema que desde hace mucho tiempo está en boca de todos: los arbitrajes. El experimentado capitán de Lanús, Carlos Izquierdoz, hizo foco en la controvertida jugada entre Manuel Mónaco y Juan Cáceres, que generó fuertes reclamos por parte del equipo granate. Visiblemente molesto, expresó su frustración por la inconsistencia en las decisiones arbitrales: "Hace poco, por una jugada que me pareció menos fuerte, nos sacaron roja, y acá el árbitro me dijo que desde el VAR le confirmaron que con la amarilla estaba bien. Gracias a Dios no le pasó nada a Juan, pero pedimos que midan con la misma vara y que sea igual para todos".
El central comenzó su reflexión abordando el otro tema que dejó la jornada: el estado de los campos de juego. No perdió la oportunidad de alabar las condiciones del terreno de juego, que soportó la intensa lluvia que azotó la provincia de Buenos Aires durante el fin de semana. "Quiero felicitar a la gente de Sarmiento, porque a pesar de todo lo que llovió, la cancha aguantó bastante bien, lo que nos permitió disputar el partido en términos casi normales", destacó Izquierdoz, reconociendo el esfuerzo del equipo local para mantener el campo en condiciones aptas para la competencia.
En lo futbolístico, Lanús tuvo varias oportunidades claras, destacándose las llegadas de Ramiro, que bien podrían haber cambiado el destino del partido. "Nosotros tuvimos un par de remates de Ramiro que fueron las jugadas más claras de gol, y creo que tuvimos más control del partido. Fuimos un poquito mejores", resumió Izquierdoz, evidenciando la leve superioridad que sintió su equipo durante el desarrollo del encuentro.
El empate en Junín marcó el tercer partido consecutivo de Lanús en la Liga Profesional que termina en tablas, una racha que comienza a inquietar al equipo dirigido por el Ruso Zielinski. Al respecto, Izquierdoz no ocultó su preocupación, aunque hizo una distinción clara entre los empates obtenidos fuera y dentro de casa: "Nos molestaron más los dos empates de local. El partido contra Central Córdoba era para ganar, y contra Godoy Cruz jugamos un primer tiempo que fue lo mejor que hicimos desde el regreso, pero en el segundo dejamos escapar dos puntos. Hoy también, por momentos, podríamos haber ganado, y te queda la sensación de que estás dejando escapar puntos. Pero los que más duelen son los de casa".
Con el parate por la fecha FIFA en el horizonte, Lanús deberá aprovechar el tiempo para ajustar detalles y recargar energías antes de enfrentar los desafíos que se avecinan. En primer lugar, el compromiso de ida por los cuartos de final de la Copa Sudamericana ante Independiente de Medellín, un duelo crucial en las aspiraciones internacionales del Granate. Luego, la reanudación de la Liga Profesional con un enfrentamiento ante Unión de Santa Fe en La Fortaleza, donde el equipo buscará revertir la sensación de puntos perdidos y volver a la senda del triunfo.
Este cierre de la temporada promete emociones fuertes, donde cada detalle será crucial para definir el destino del equipo granate en ambos frentes. Los próximos partidos serán una prueba de fuego para Lanús, que deberá demostrar su capacidad de reacción y consolidar su juego para aspirar a objetivos mayores.
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