Sofia Menconi, esposa de la única raqueta argentina en el Masters 1000 que se disputa en el estado de Florida, está embarazada, a diez días de dar a luz. "Me dijo que si está por nacer, se vuelve", confesó.
La vida del tenista es compleja: aviones, hoteles, traslados, torneos, triunfos, derrotas, derrotas, derrotas. Horacio Zeballos tiene una esposa en Buenos Aires. Y una hija, Ema, que está a punto de nacer: en diez días, Sofia Menconi, la esposa del único tenista argentino que sobrevive en el Masters 1000 de Miami, tiene fecha para el parto.
"Él está muy atento para ver cómo está el embarazo. Su idea era volver si había síntomas de que sea delantaba la fecha. Él quiere eso, yo quiero que esté acá, pero también está pasando por un momento bárbaro y tampoco es tan fácil volverse de Miami en dos minutos. Dice que va a ser así. Yo creo que va a esperar", contó Menconi, en una charla con La Once Diez. El propio Zeballos, entre risas, confirmó la versión: "Es mucho más importante el nacimiento de mi hija: si lo iba a hacer Murray en una final de Grand Slam, ¿cómo no lo voy a hacer yo?".
Menconi agregó que "me enteré 20 minutos antes del partido con Del Potro de que seguía en el torneo", y que "me pone muy nerviosa no ver los partidos que juega". También reveló que se llamará Ema, producto de una deformación de otro nombre que tenían en la cabeza, Umag: "Le íbamos a poner Umag por el torneo de Croacia. Pero cuando nos enteramos que íbamos a ser padres, él dijo que Umag no, porque no podía ponerle el nombre de una ciudad por un torneo. Y de Umag fue quedando Ema".
Zeballos jugará mañana ante David Goffin, en busca de los cuartos de final del torneo. Si no consigue la clasificación, regresará a Buenos Aires para estar cerca de su esposa en el parto. Si no, seguirá con un oído puesto en el país.