Durante el primer semestre del año la agencia ARBA detectó 1,5 millón de metros cuadrados en inmuebles sin declarar, los cuales fueron incorporados al Catastro provincial para que tributen lo que corresponde. El ente recaudador explicó que tras los procedimientos de verificación y notificación correspondientes, esas construcciones y mejoras fueron regularizadas e incorporadas a registros catastrales, lo que significará un incremento de 53 millones de pesos anuales en la recaudación del Impuesto Inmobiliario Urbano Edificado. Además, puntualizó que las infracciones catastrales fueron detectadas en alrededor de 6 mil inmuebles de distinto tipo, ya sea edificios, countries, casas, establecimientos comerciales e industriales, complejos recreativos, entre otros.
“En ciertos casos, se trataba de construcciones que estaban declaradas como baldíos; en otros, ampliaciones o mejoras que los dueños habían evitado inscribir ante el Fisco para pagar menos impuestos”, señaló ARBA.