En Barracas, alrededor del Parque Leonardo Pereyra, una reliquia natural de casi 60.000 metros cuadrados, y del complejo del Sagrado Corazón, presentaron un proyecto para preservar la visual abierta y el pintoresco paisaje de calles de adoquines, PH, casas y edificios bajos en lotes pequeños, que conviven con talleres y fábricas distribuidos en manzanas irregulares.
El Sur de la Ciudad fue uno de los lugares que el Gobierno porteño potenció desde el traslado del edificio donde funciona todo el Poder Ejecutivo. Además se creó el Polo tecnológico y fueron muchas las empresas que decidieron radicarse en la zona y desde ese lugar empezar a construir un mejor lugar para todos.
“Las modificaciones urbanísticas que se podrían llegar a producir en este entorno impactarían significativamente en el carácter del parque, en las construcciones religiosas y en el barrio en su conjunto”, señala el proyecto de creación del área de amortiguación visual, remitido por la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos a la Legislatura porteña la semana pasada.
Lo que harán los diputados será sancionar el nuevo Código Urbano, que regula las alturas de los edificios en la ciudad. Luego de varias reuniones entre la Comisión de Monumentos y el Ministerio de Desarrollo Urbano para estipular cuánto deben medir las edificaciones en esa zona de Barracas, se acordó que el flamante código prohíba construcciones de más de 10,5 metros de altura en el entorno inmediato de la Basílica del Sagrado Corazón y del Parque Pereyra, ambos declarados monumento histórico nacional en 2017.
“Con el anterior código, que data de 1977, se pueden construir torres alrededor de un parque. Ahora, para proteger la identidad del barrio, acordamos bajar la altura alrededor de esos dos monumentos, es decir, en el borde y pegado a ellos”, explicaron desde el ministerio. Según el organismo, no tiene sentido proteger las parcelas que están más allá, es decir, las que estarían incluidas en el área de amortiguación propuesta.
“Ese proyecto no tiene un criterio, lo que protegemos son las áreas de protección histórica (APH)”, añadieron. Este es un gran avance en la idea de cuidar, de proteger no solo al barrio, sino a una reserva natural, a un pulmón que trabaja limpiando la ciudad y sobre todo al barrio.
Es que en los detalles del proyecto lo que se prohibirá es la construcción de edificios de más de tres pisos, más allá del entorno inmediato de los dos monumentos, dentro de una zona más amplia, formada por un polígono delimitado por las calles Australia y Perdriel, Australia hasta Santa Elena, Santa Elena hasta Osvaldo, Osvaldo Cruz ambas aceras hasta Luzuriaga, Luzuriaga, Luján, Vélez Sarsfield, Osvaldo Cruz hasta Luna, Luna hasta vías del ferrocarril, vías hasta Perdriel, y Perdriel hasta Australia, incluida la Colonia Sola.