Para varios comercios de Ramos Mejía, la cuarentena y el cierre obligado significó el fin, algo que puede comprobarse recorriendo la zona céntrica de la ciudad: locales ya cerrados y con carteles que anuncian que están en alquiler, o que aparentan que abrirán sus puertas cuando se levanten las restricciones, pero que ya anunciaron el fin.
Es el caso de la Confitería Edelweiss, en una de las esquinas de Avenida de Mayo y Belgrano, a metros de las por ahora desoladas paradas de las líneas de colectivos 88, 96, 205, 378, 620 y 621. "Esta feroz crisis, sin precedentes, nos fuerza a cerrar las puertas de esta casa", señalaron sus dueños en su cuenta de Facebook, donde recordaron que abrió en diciembre de 1986.
A metros de allí, en Avenida de Mayo 146, Le Paris Femme Boutique -que cuenta con una réplica de la Torre Eiffel en la vereda- exhibe grandes carteles que señalan "dueño alquila local", lo cual marca que las persianas cuando vuelvan a levantarse ya no darán paso a ese negocio.
Y mientras hay locales que promocionan la venta online a través de las redes sociales, hay otros que informan sobre una "liquidación total" de su mercadería, un preanuncio de que su cierre es inminente, como consecuencia de cuatro meses de una actividad muy limitada y el mantenimiento de elevados costos.