A los 93 años, falleció el actor Mickey Rooney, considerado por varios críticos y fanáticos del cine y la televisión como una leyenda de Hollywood, y cuya carrera se extendió a los largo de 80 años.
Rooney se encontraba con su familia al momento de su deceso el domingo, en su casa de North Hollywood, según informó la policía de Los Ángeles. El portavoz del departamento de policía informó, además, que Rooney falleció de causas naturales.
Es probable que nadie en el mundo del espectáculo iguale la duración y variedad de la carrera de Rooney: fue estrella de comedias del cine mudo, musicales de la MGM en los que trabajó con Judy Garland, participó en los populares filmes de Andy Hardy, fue ganador del Emmy por su actuación en un programa de TV y tuvo gran éxito en Broadway con "Sugar babies".
Rooney era el último sobreviviente de la era de los grandes estudios de Hollywood. En 1934 firmó su primer contrato, para interpretar a un joven Clark Gable en "Manhattan Melodrama" y un año después fue prestado a Warner Brothers para representar a un exuberante Puck en "A midsummer night's dream", en la que también participaron James Cagney y Olivia de Havilland.
Pronto estaba ganando un sueldo de 300 dólares a la semana por actuar en cintas como "Riff Raff", "Little Lord Fauntlero", "Captains Courageous", "The Devil Is a Sissy", y más notablemente, como un niño malcriado que es disciplinado por el padre Flanagan, que interpretada Spencer Tracy, en "Boys Town".
El gran éxito llegó cuando filmó "A Family Affair", donde interpretó al personaje de Andy Hardy que se volvió sumamente popular y generó sus propios filmes.
Estuvo nominado a cuatro premios Oscar y ganó dos estatuillas especiales.
También se le conoció por su colorida vida privada que incluyó ocho matrimonios."Siempre digo: no te retires, es mejor que inspires. Hay mucho por hacer"', le expresó en 2008 a The Associated Press.