El ex futbolista no da marcha atrás en su decisión de desalojo de su última mujer, pero dijo que la medida no incluye a la madre de ella. Todo hace suponer que se trata de una venganza para con Rocío Oliva
Diego no da marcha atrás. Luego de mandar una carta documento y de iniciar el trámite de desalojo de Rocío Oliva, el Diez le insistió a sus abogados para que aceleren los trámites en la Justicia y se haga efectivo el abandono de la casa de Bella Vista. Ayer, en diálogo con Carlos Monti por Radio 10, José Vera, abogado de Rocío, confirmó que todo sigue como la semana pasada, pero dio detalles de lo que fue la última charla entre su defendida y Diego.
"La que tiene que irse sos vos, no tu familia. Si no te voy a hacer juicio", dijo Vera que fue la amenaza que lanzó Diego para su ex pareja. Con esta confirmación queda más que claro que lo del Diez es una venganza para con Rocío. Es que su ex pareja hace un tiempo que decidió dar por terminada cualquier relación y ni siquiera permite que el astro la llame por teléfono. Rocío dio de baja su número habitual y sacó una nueva línea que no le dio a Maradona por lo que se le hace imposible hablar con ella. "Es que después de todo lo que pasó Rocío no quiere saber nada. Sufre mucho todas las acusaciones y hoy quiere vivir su vida", comentó Vera.
Cuando se conoció la noticia del pedido de desalojo, Rocío dijo que el arreglo para que viviesen en esa casa Diego lo había hecho con su madre. Los dichos de Vera confirman esa versión. El tema es que no hay nada firmado y por eso ahora el Diez reclama su propiedad. Pero parece que el pacto que hicieron en Dubai entre la madre de Rocío y Diego se respetará ya que según sus dichos la única que debe abandonar la casa es su ex pareja. Lo que habrá que ver ahora es cual es la decisión de Rocío. Si permite que su familia siga viviendo en la casa de Bella Vista y ella se busca un nuevo hogar o si todos deciden irse.
"No estamos buscando casa, nos vamos a ir no cuando diga Diego, sino cuando encontremos el lugar que buscamos", dijo desafiante. El tiempo será quien tenga la última palabra...
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