Fútbol
“El equipo ante todo” parece ser la premisa a cumplir a rajatabla por el equipo dirigido por Falcioni. Firmeza, tranquilidad y mentalidad ganadora son atributos recuperados por un grupo que dejó atrás el mal momento.
GABRIEL FERNANDEZ
En menos de una semana, Boca recuperó todo. Su identidad como equipo, su postura segura y ganadora y, fundamentalmente, la tranquilidad. Y todo esto se refleja en la figura del entrenador. Julio Falcioni siente que ese frente de tormenta, léase dos derrotas consecutivas, que amenazó con desestabilizarlo se alejó a partir de los triunfos sobre Arsenal por la Copa y San Martín en el ámbito local.
El entrenador se mostró muy sereno tras los noventa minutos que le dieron forma a esta excursión cuyana. El triunfo y el hecho de sentir que esas virtudes que condujeron a su equipo a la consagración de diciembre, están intactas, le cambió el semblante. A tal punto que, ya sin cábala de camisa a cuadros, anunció que el próximo viernes retomará su habitual contacto, bajo la modalidad de la conferencia, con la prensa.
Claro que el Mundo Boca corre con esa exigencia que implica el tener que ratificar en cada competencia, y hasta en cada juego, todos los pergaminos que se consiguieron antes. Y el entrenador lo sabe y por eso también es consciente que se viene un mes (ver agenda) tan cargado como importante que puede sellar la suerte de su equipo en todos los frentes.
Y para ello maneja una estrategia que ya insinuó, la de la rotación, en los últimos partidos. El técnico quiere que todos los jugadores estén en las mejores condiciones físicas posible porque su ambición es ir por todo.
En menos de una semana, Boca recuperó todo. Su identidad como equipo, su postura segura y ganadora y, fundamentalmente, la tranquilidad. Y todo esto se refleja en la figura del entrenador. Julio Falcioni siente que ese frente de tormenta, léase dos derrotas consecutivas, que amenazó con desestabilizarlo se alejó a partir de los triunfos sobre Arsenal por la Copa y San Martín en el ámbito local.
El entrenador se mostró muy sereno tras los noventa minutos que le dieron forma a esta excursión cuyana. El triunfo y el hecho de sentir que esas virtudes que condujeron a su equipo a la consagración de diciembre, están intactas, le cambió el semblante. A tal punto que, ya sin cábala de camisa a cuadros, anunció que el próximo viernes retomará su habitual contacto, bajo la modalidad de la conferencia, con la prensa.
Claro que el Mundo Boca corre con esa exigencia que implica el tener que ratificar en cada competencia, y hasta en cada juego, todos los pergaminos que se consiguieron antes. Y el entrenador lo sabe y por eso también es consciente que se viene un mes (ver agenda) tan cargado como importante que puede sellar la suerte de su equipo en todos los frentes.
Y para ello maneja una estrategia que ya insinuó, la de la rotación, en los últimos partidos. El técnico quiere que todos los jugadores estén en las mejores condiciones físicas posible porque su ambición es ir por todo.
Cuestión de respaldo
La postura de ambas partes es clara. Fue como que entre jugadores y entrenador hubo un pacto para, por el bien de todos y fundamentalmente para contar con una convivencia llevadera en este semestre tan importante, correr al costado del camino el cortocircuito que se desató en Venezuela allá por febrero.
Por eso, a la hora de declarar, los jugadores muestran señales de respaldo para con el entrenador y el DT, desde entonces, siempre, hasta la semana pasada vía Twitter, soltó elogios y palabras de agradecimiento para sus dirigidos. Además, en las últimas horas el presidente Daniel Angelici se encargó, en otra muestra de confianza hacia este proyecto, de garantizar que, pase lo que pase, se respetará el contrato que une al actual cuerpo técnico hasta diciembre.
Dentro de este contexto, Julio Falcioni cuenta con un grupo de futbolistas que no tampoco quieren dejar escapar nada. Con su abanderado, Juan Román Riquelme, que seguramente volverá a estar en los tres partidos en cadena que se avecinan (recién descansaría por Copa Argentina) y con otros titulares importantes que, el caso de Clemente Rodríguez, Rolando Schiavi, Diego Rivero, Walter Erviti o Leandro Somoza, deberán ir manejando el tema de las cargas físicas y las tarjetas.
Boca está intacto. Otra vez maquillado para mostrar su mejor cara y con la fortaleza necesaria para ir por la apuesta grande. Y esto, después de aquellos movimientos peligrosos que amenazaron con derribar su estantería, no parece ser poca cosa.
La postura de ambas partes es clara. Fue como que entre jugadores y entrenador hubo un pacto para, por el bien de todos y fundamentalmente para contar con una convivencia llevadera en este semestre tan importante, correr al costado del camino el cortocircuito que se desató en Venezuela allá por febrero.
Por eso, a la hora de declarar, los jugadores muestran señales de respaldo para con el entrenador y el DT, desde entonces, siempre, hasta la semana pasada vía Twitter, soltó elogios y palabras de agradecimiento para sus dirigidos. Además, en las últimas horas el presidente Daniel Angelici se encargó, en otra muestra de confianza hacia este proyecto, de garantizar que, pase lo que pase, se respetará el contrato que une al actual cuerpo técnico hasta diciembre.
Dentro de este contexto, Julio Falcioni cuenta con un grupo de futbolistas que no tampoco quieren dejar escapar nada. Con su abanderado, Juan Román Riquelme, que seguramente volverá a estar en los tres partidos en cadena que se avecinan (recién descansaría por Copa Argentina) y con otros titulares importantes que, el caso de Clemente Rodríguez, Rolando Schiavi, Diego Rivero, Walter Erviti o Leandro Somoza, deberán ir manejando el tema de las cargas físicas y las tarjetas.
Boca está intacto. Otra vez maquillado para mostrar su mejor cara y con la fortaleza necesaria para ir por la apuesta grande. Y esto, después de aquellos movimientos peligrosos que amenazaron con derribar su estantería, no parece ser poca cosa.
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