"Los dirigentes de San Lorenzo nunca me bancaron"

En diálogo con radio La Red, Caruso sugirió una "operación" de Tinelli y Lamens en su contra. "¿Sabés lo que hacen? Dicen: 'Metele un poquito de púa a este gordo, que se calienta y empieza a hacer quilombo'. Pero como yo nunca me enojé, no pudieron decir nada", acusó.

"Me están haciendo una operación por atrás. Es una maldad muy grande", cuestionó el DT. Y fue más allá: "Los jugadores me quieren todos, eh. Para que me vaya de San Lorenzo me van a tener que echar".

Caruso continuó su hipótesis sobre una supuesta conspiración al afirmar que "los periodistas me viven preguntando por mi continuidad". Y añadió: "Siempre esperan algo para pegarme... Yo me la banco pero a veces tengo dolor de panza".

"Dicen que hablaron con Pizzi, que vieron el partido junto a Víctor Fernández (español, otro de los candidatos) que no sé ni quien es... Si quieren que hablen con (Louis) Van Gaal, pero me tienen que respetar. Ni siquiera me llamaron", protestó -picantísimo- el técnico ante la designación de Pizzi en su reemplazo.

Caruso centró luego sus críticas en el presidente de San Lorenzo, a quien acusó de haber revelado la charla de ayer en la que se negoció una salida consensuada. "Yo hablé con Lammens y al rato lo sabían todos. Y yo no conté nada. Entonces, ¿quién fue?", se preguntó.

También aludió a su vínculo con Tinelli. "Lo único que me objetó desde el principio fue mi exposición ante los medios. Después mi relación con él siempre fue buena", señaló.

No obstante, consultado sobre las presuntas críticas dirigenciales a su estilo y estética, Caruso reveló: "Contra Racing me puse un traje a propósito".

Como remate de su furibundo discurso, Caruso sorprendió con una autocrítica. "No estoy haciendo una buena campaña. Cuatro o cinco puntos más teníamos que haber sacado", reconoció, antes de volver a la carga. "Esos puntos los perdimos por no jugar como yo sé jugar esos partidos. Las tres veces que jugamos con enganche y dos puntas perdimos", sentenció.