
Tras perder con Racing y quedar eliminado del Torneo Clausura, el entrenador definió como "pésimo" el último trimestre decisivo del 2025 pero dejó en claro: "Esto no va a terminar así".
Tras el fin de año de River con la derrota 3 a 2 con Racing en el Cilindro de Avellaneda y la eliminación en octavos de final del Torneo Clausura, Marcelo Gallardo definió como "pésimo" el último trimestre decisivo del equipo, asumió la responsabilidad y aseguró su continuidad más allá de los malos resultados.
"El partido de hoy puede ser una consecuencia de lo que fue este último trimestre. Claramente nos ha sido muy difícil sostenernos como equipo y estamos desilusionados por cómo lo terminamos. No fue un final de año como hubiésemos querido", se sinceró el Muñeco. Y añadió: "Es un año totalmente negativo e incómodo para nosotros".
"Hay que hacerse cargo. Asumo la responsabilidad de este momento y de este año, pero me tomaré estos días para reflexionar y revisar, para cambiar. Esto no va a terminar así. Termina el año, para nosotros de manera negativa, pero en mi cabeza empezaré a pensar cómo seguimos", comentó Gallardo.
"Seguramente he fallado y soy muy autocrítico conmigo. Yo no tengo ningún tipo de inseguridades: cuándo las cosas no salen soy el responsable y cuando las cosas salen suelo ser el responsable también. Es un año malo dentro de mi carrera como entrenador, y lo asumo, pero tuve también otros buenos", agregó el entrenador más ganador de la historia del club con 14 títulos, entre ellos dos Copa Libertadores.
Por otro lado, el DT explicó qué le faltó al equipo y a él como cabeza del mismo: "Hemos perdido mucho, nunca me había pasado. Antes de jugar cuartos de final con Palmeiras teníamos dos derrotas en el año. No hemos sido un equipo fuerte mental, física y futbolísticamente y yo no pude generar que el equipo dé ese salto de calidad".
Ahora, sus fuerzas para continuar en el cargo siguen siendo fuertes: "Yo no le voy a escapar a este momento, voy a dar la cara como tiene que ser, como me lo he ganado. He tenido varios golpes duros en la vida y acá estoy parado, y seguiré parado más allá de lo que venga. Cuando yo decida, o cuando decidan, que no estoy capacitado o que no tengo la energía para estar al mando de una responsabilidad enorme como significa estar acá sentado, ahí seré el primero en decir 'me corro'".
Con respecto a la incertidumbre sobre qué competencia internacional jugará su River el próximo año sentenció: "No tener que depender de nosotros es incómodo. No le tengo miedo a empezar el año desde el lugar que corresponda, con la cabeza totalmente renovada y haciéndome cargo de lo que venga. Desde ese lugar espero reestructurarnos, refrescarnos y volver a conformar una estructura que nos identifique".
El 20 de diciembre, River comenzará la pretemporada pensando en el 2026. El entrenador dio a entender que en este mes que tendrá hasta la vuelta a los trabajos tomará decisiones con respecto a los refuerzos y hará una renovación del plantel. Allí también tendrá un panorama más claro sobre qué competición internacional jugará: si Boca, Argentinos o Lanús salen campeón, disputará la Fase 2 de la Copa Libertadores en cambio si se consagra cualquier otro equipo jugará la fase de grupos de la Sudamericana.