Dentro de este contexto, las chicanas se pusieron nuevamente a la orden del día. Mientras por el lado de Boca se encargan de resaltar que "a ellos con una popular le alcanzaba", desde el bunker granate instalado en el Sheraton, la respuesta fue "nunca pudimos devolver ocho mil entradas porque no nos dieron esa cantidad". Vale recordar que la parcialidad del campeón se ubicará en la Popular Norte, con ingreso por la Avenida Juan B. Justo y Cepeda, en tanto que los hinchas de Boca se ubicarán en el sector Sur, con entrada por el paseo de las Olimpiadas.
En cuanto al operativo policial, que arrancó muy temprano en la ciudad y las rutas de acceso desde Buenos Aires, tendrá en el estadio 750 efectivos. Para pasar cada uno de los controles se deberá mostrar el ticket correspondiente. El grueso de la hinchada de Boca, con Rafael Di Zeo y Mauro Martín a la cabeza, partieron desde La Boca a las doce del mediodía y su mapa de viaje, dispuesto por los organismos de seguridad, es por la autovía 2. Los de Lanús, que salieron desde el estadio a las 13.30, lo hacen por la 210, luego la 29 y, desde Balcarce, el tramo final lo harán por la 226. Los hinchas de Lanús que arriben en ese lote de la caravana y lo hagan sin entrada, serán los únicos que puedan comprar una entrada.
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