Los metrodelegados paralizaron este jueves la Línea B de subtes por dos horas en el arranque del servicio y resolvieron extender las medidas de fuerza en los próximos días en rechazo al acuerdo de incremento salarial firmado entre Metrovías y la Unión Tranviarios Automotor (UTA).
El servicio de la Línea B de subterráneos estuvo interrumpido entre las 5.30 y las 7.30, por lo que algunas líneas de colectivos -entre ellas la 71 y la 19- reforzaron sus servicios con un aumento de las frecuencias.
El paro en la línea que comunica los barrios porteños de Villa Urquiza y Puerto Madero fue el último del plan protestas que había dispuesto para esta semana la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), aunque este jueves por la tarde finalmente decidieron extender las medidas de fuerza hasta el próximo miércoles inclusive.
“Anunciamos que frente al cierre de la paritaria anunciado por la Subsecretaría de Trabajo de la Ciudad de Buenos Aires con propuestas económicas insuficientes y alejadas de lo solicitado por este sindicato, se ha dispuesto la continuación del plan de medidas de autodefensa iniciado el lunes 16 de abril”, indicaron los metrodelegados en un comunicado.
Este plan, de acuerdo a lo aprobado en el plenario de delegados, consiste en una serie de apertura de molinetes y paros por línea, “de forma de afectar en la menor forma posible a los usuarios del subte”, se indicó. De acuerdo al nuevo cronograma, hoy habrá una apertura de molinetes en la estación Constitución de la Línea C entre las 7 y las 9; mientras que el lunes se paralizará esa misma línea desde las 5.30 a 7.30, lo que afectará a miles de usuarios que se trasladan desde el sur del conurbano a la Capital Federal para trabajar en el horario pico de la mañana.
El martes, en tanto, también se abrirán los molinetes en la estación Congreso de Tucumán de la Línea D entre las 7 y las 9, en tanto que el miércoles habrá paro en ese ramal desde las 5.30 y hasta las 7.30.
“Estamos abiertos a concurrir a las reuniones que sean dispuestas por la Subsecretaria de Trabajo de la Ciudad con el objetivo de lograr un aumento salarial para nuestros representados que considere la proyección inflacionaria prevista para este año y la perdida inflacionaria del año pasado. Llamamos a la reflexión a las autoridades de la Ciudad de Buenos Aires responsable del acuerdo salarial cerrado y aguardamos que retomen la discusión paritaria con este sindicato”, indicaron los metrodelegados en un comunicado.
Las medidas de fuerza se realizan en rechazo al incremento del 15,2 por ciento acordado por la UTA para los más de 3.000 trabajadores del subte y el Premetro, que se abonará en tres tramos (marzo, julio y agosto) y prevé una cláusula de revisión y gatillo.
En esa audiencia no participaron los metrodelegados, luego de que el mes pasado un fallo de la Corte Suprema suspendió la personaría gremial de la AGTSyP, alegando irregularidades en el trámite para su obtención. “La negociación con el Gobierno está cortada porque nos ofrecen algo aberrante, nos imponen un descuento compulsivo. Estamos en plan de lucha, tratando de complicar lo menos posible a los usuario”, indicó el metrodelegado Roberto Pianelli en declaraciones a radio Cooperativa.
Metrovías, por su parte, lamentó “que la decisión de los representantes gremiales sea, una vez más, afectar a unos 15 mil usuarios que utilizan la Línea B en esa franja horaria para llegar a sus lugares de trabajo y/ o trasladarse por la ciudad”.
Agregó la empresa en un comunicado que a principios de esta semana, “hemos realizado la denuncia correspondiente ante las autoridades laborales, a través de la cual solicitamos su inmediata intervención para que se declare la ilegalidad de dicha medida y se califique al subterráneo como un servicio de carácter esencial”.