El Papa Francisco confesó que quedó "conmovido" durante su visita a la casa de acogida en la que encontró este viernes en Manila a unos 300 niños salvados de la calle.
"Hoy me he quedado conmovido, cuando tras la misa visité a los niños solos, sin familia. ¡Cuánta gente trabaja en la Iglesia para que tengan una familia estos niños!", expresó en español durante el encuentro con las familias que celebró en un palacio de deportes de Manila.
La casa, que se encuentra al lado de la catedral, hospeda a 20 niñas, pero en el patio se reunieron además de 20 huéspedes fijas, también muchos otros de los 320 niños de la calle que la fundación TNK reúne en otras casas de la ciudad.
El Papa habló con los pequeños, se intercambiaron regalos, se sacaron fotos.
La Fundación TNK es liderada por un sacerdote francés, padre Mathieu, ordenado sacerdote en Filipinas y ahora en la diócesis de Manila.
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