Después de horas de preocupación por el paradero de la periodista rusa Marina Ovsyannikova, un día después de que interrumpiera un noticiero de un canal de televisión estatal con un cartel que condenaba la guerra en Ucrania, la mujer fue liberada y multada por el gobierno de Rusia.
El defensor de Ovsyannikova, Dmitry Zakhvatov, había dicho más temprano que no sabían dónde se encontraba la mujer. Aunque poco tiempo después mencionó que la ubicaron en un tribunal de Moscú. Una foto que muestra a la periodista de Channel One con otro de sus defensores, Anton Gashinsky, fue publicada en Telegram esta tarde.
Según el medio independiente ruso Meduza, la multa es por un vídeo donde llamaba a la población rusa a manifestarse contra la invasión, no por la protesta durante los informativos, por la que sigue siendo investigada.
Tras la vista judicial, Ovsyannikova dijo a los periodistas que había sido interrogada durante más de 14 horas sin que se le diera ayuda legal ni la oportunidad de ponerse en contacto con sus seres queridos, informa la BBC. “Fue mi decisión contra la guerra. Yo hice esta decisión por mí misma porque no me gusta que Rusia empezara esta invasión. Fue realmente terrible”, dijo a la BBC.
“Es un crimen y Rusia es el agresor. Mi padre es ucraniano, mi madre es rusa. Nunca fueron enemigos. Este collar que llevo al cuello es el símbolo de que Rusia tiene que detener esta guerra fratricida inmediatamente. Nuestros pueblos hermanos aún pueden hacer la paz”, había expresado Marina en un video anterior a la interrupción.
Este martes, el Comité de Investigación de Rusia abrió una investigación sobre lo sucedido para determinar si cometió de “difusión pública de información falsa a sabiendas sobre el uso de las Fuerzas Armadas rusas”, según informa la agencia estatal rusa TASS citando a una fuente de la fuerzas de seguridad.
Rusia aprobó el pasado 4 de marzo enmiendas al código penal que permiten sancionar hasta con 15 años de cárcel a los periodistas que informen sobre la guerra en Ucrania utilizando esta nueva legislación supuestamente contra la “información falsa” sobre el Ejército ruso y sus operaciones.
La semana pasada, expertos de la ONU calificaron de “alarmante” la nueva ley rusa de “noticias falsas sobre la guerra”. “Somete a Rusia a un apagón informativo total sobre la guerra”, dijeron, y denunciaron que ya había tenido consecuencias con el bloqueo o limitación a medios internacionales y a redes sociales.