Es que la exposición a la que llevaron al partido por estos días es algo que preocupa mucho al líder y candidato a presidente para las elecciones del año que viene. Y tan preocupado está que, según Rial, le mandaron
un claro mensaje de bajar el tono al escándalo y meterse más de lleno en la campaña política.
"Hoy, no sé si en este momento o hace un rato, tampoco sé si a raíz de los mensajes que pusimos al aire ayer, pero en el Frente Renovador se hizo una reunión entre los máximos representantes y hablaron del tema Redrado. Ellos sienten que esto les está haciendo daño político y todo el equipo de campaña está criticando fuertemente la actitud de Redrado. Es más, en palabras de Sergio Massa, la frase que se escuchó fue: 'Que se deje de mirar la bragueta y se ponga a hacer más política y a pensar en cómo bajar la inflación'", fue lo que contó el líder de Intrusos.
Es que en el programa se mostraron mensajes entre el economista y Luli Salazar mientras él salía con Granata. Este doble juego tampoco cayó muy bien en la interna del partido y Rial comentó que un diputado fue terminante a la hora del análisis. "Si este hombre juega a dos puntas en su vida privada, ¿quién nos garantiza que no lo haga en la política?", contó el Intruso.
Por otra parte, en los mensajes de texto que trascendieron, Redrado le contaba a Luciana Salazar que en el caso de llegar al poder Sergio Massa, él ocuparía un cargo como Canciller y le proponía ser su dama de compañía en la futura carrera política.
Los escándalos amorosos ponen en jaque a Redrado en la política
Este anticipo en la intimidad que trascendió en los medios
fue muy mal visto por otros referentes del partido que, por supuesto, tienen las mismas aspiraciones. "Que él le diga a Luciana Salazar que iba a ser canciller, le trajo un despelote interno en el Frente Renovador. Es que hay mucha que quiere ocupar esos cargos y que él ya se lo haya dicho a Luli Salazar generó lío", comentó Rial.El escándalo de la semana sigue generando nuevos capítulos y ya deja de ser un tema mediático para provocar ruido interno en uno de los partidos mejor perfilado de cara a las elecciones.
A Redrado no lo ven con buenos ojos y de a poco comienzan a dejarlo a un costado. La frase de Sergio Massa, el líder del FR, así lo certifica.