“TENIA GANAS DE HACER UNA OBRA QUE NO FUERA COMUN”, DICE EL ACTOR AL HABLAR DE “LAS MALAS PALABRAS, VIRTUDES DE LA OBSCENIDAD”, QUE REALIZA EN EL NUEVO TEATRO PORTEÑO. TAMBIEN EXPLICA LAS RAZONES POR LAS QUE DEJO LA TV
Por Marcela Korzeniewski
Hablar obscenamente nos permite amar mejor en la intimidad”, señala Daniel Kuzniecka en relación a la temática central de su espectáculo Las Malas Palabras, Virtudes de la Obscenidad, que realiza en el nuevo Teatro Porteño. Se trata de una adaptación para teatro del libro del psicoanalista Ariel Arango, que fue best seller en los ‘80.
“Tenía ganas de hacer un espectáculo que no fuera común, que no tuviera los parámetros que tienen la mayoría de las obras”. Ese fue el punto de partida que lo llevó a bucear en su biblioteca y a detenerse ante aquel libro que había leído años atrás y que había dejado tanta huella en él. “Yo uso las malas palabras sin ningún pudor -afirma-. A lo sumo puedo cuidarme de decirlas por respeto a personas que sé que sí les puede generar eso. Y más, habiendo leído este libro en mi adolescencia, me doy cuenta del sentido profundo que tienen”.
Es la segunda vez que realiza el espectáculo, que se estrenó el año pasado y donde desarrolla un formato de conferencia didáctica respaldada con imágenes y teorías freudianas, mientras hace diversos monólogos con humor. “Es un espectáculo especial para ver en pareja y si uno está hace años en pareja. Porque uno de los puntos que abordamos tiene que ver con pensar en esa regularidad casi rutinaria que a veces presupone la vida de pareja, que es una gran enemiga del placer, porque cog... no puede ser nunca una cuestión de rutina. Tiene que tener siempre el carácter de una celebración”.
¿En qué sentido las malas palabras pueden ayudar a la intimidad de una pareja?
-Cuando no hay conquista, se torna muy difícil mantener la pareja. La actitud más fiel que pueda tener un hombre va a requerir mayor demanda de potencia sexual que la más exigente de las experiencias poligámicas. Porque cada vez que vos te querés levantar a alguien, se ponen en funcionamiento en tu organismo y en el del otro glándulas que hacen que la cosa sea más calentona. Pero cuando llevás años, se hace más complicado. Es por eso que el autor nos pregona que en la cama se pueden encontrar y hablar obscenamente porque eso retroalimenta la vida en pareja.
¿O sea que el tema más profundo de la obra es el amor?
-Sí. Porque hoy en día está ese famoso ‘touch and go’, o como lo quieran llamar, con lo cual yo no estoy para nada en contra. Pero sí estoy en contra de que se hable en contra del amor, de que se hable en contra de la fidelidad.
¿Te fuiste de Herederos de una Venganza por la obra?
-La idea al principio era poder trabajar todo el año en la novela, pero yo no trabajo solamente en la televisión y no contaba con que este año iba a estar teniendo que levantarme casi todos los días a las 5 de la mañana.
Así que solicité una reunión donde planteé mi inconveniente que fue comprendido y aceptado. Nada más.